Se salvan “por los pelos” de un derrumbe en su vivienda

Asolo unos segundos de una desgracia. El derrumbe de una casa en la calle Vicario se saldó sin heridos gracias a la rapidez de reflejos de los habitantes del número 25, un matrimonio que, ahora, vive con una de sus hijas cerca del lugar donde ocurrió todo. El hombre, al escuchar un crujido a altas horas de la madrugada, decidió salir junto a su mujer de la vivienda, que se desplomó, según Bomberos de Jaén, unos segundos después.

Tras el colapso, agentes tanto de Policía Local como Bomberos se encargaron de revisar la vivienda. Después, según informan fuentes municipales, se trasladó hasta el 25 de la calle Vicario un técnico de Urbanismo para evaluar los daños.

El matrimonio se queda, por el momento, en casa de una de sus hijas, que vive también en el casco histórico. Desde el Ayuntamiento aseguran que el primer parte que emitió Bomberos hace referencia a que en la vivienda había cuatro ocupantes. Nada más lejos de la realidad. La confusión viene dada porque, cuando llegaron al lugar de los hechos, los agentes vieron que en la casa colindante —el 23— había cuatro personas. Ya por la mañana, una vez terminaron con la intervención, comprobaron que esa vivienda es propiedad de un banco, por lo que todo apunta a que se trata de cuatro okupas, ya que, según aclaran fuentes del Ayuntamiento, en la vivienda que se derrumbó vivía únicamente un matrimonio. Los dos están bien, aunque aún con el susto por todo lo ocurrido la pasada madrugada.

Agentes de Bomberos entraron en la vivienda, una vez el técnico de Urbanismo la inspeccionó, para sacar ropa y otros enseres que el matrimonio pudiera necesitar. Desde el Ayuntamiento confirman que el matrimonio recibirá hoy la visita de Ángeles Díaz de la Torre, concejal de Políticas Sociales, para conocer de primera mano las necesidades de los dos ocupantes de la casa. Por ejemplo, el hombre hacía uso de una cama articulada, por lo que si es necesario será el propio Ayuntamiento el que se la reponga. Hasta el momento, según las fuentes, no expresaron nada al respecto, aunque puede ser fruto de los nervios por lo ocurrido. De todos modos, la Administración local pone a disposición de los dos afectados lo que puedan necesitar.

Solo hay que lamentar daños materiales tras un derrumbe que ocasionó conmoción en el barrio. Ambos consiguieron salir de la casa segundos antes de que todo se viniera abajo. Ahora solo queda esperar para ver, por ejemplo, dónde se reubicará al matrimonio.