Retraso en las obras de Roldán y Marín por culpa de las lluvias

Nunca llueve a gusto de todos y, en esta ocasión, las últimas precipitaciones registradas en la ciudad retrasaron las obras en la calle Roldán y Marín. No obstante, tal y como confirman desde el Ayuntamiento, se estima que a finales del presente mes “volverán a estar sobre la planificación” en cuanto a los tiempos contemplados se refiere.

Así lo indica el concejal de Mantenimiento Urbano e Infraestructuras Municipales, Javier Padorno, que asegura que la intervención va “a buen ritmo”. En concreto, las obras se encuentran en la fase de apertura del acceso desde el aparcamiento de la Plaza de la Constitución hasta el que se quiere construir en San Clemente, por lo que se puede decir que los pequeños retrasos ocasionados por la lluvia no afectarán a que, finalmente, la intervención concluya dentro del plazo estipulado al inicio de dichas reformas.

En otro orden de cosas, Padorno reconoce que ha habido una serie de cuestiones técnicas en la zona de arriba y que la empresa concesionaria de las obras “ha atendido las peticiones con muy buen criterio”. El concejal precisa que se trataba de necesidades como mejoras en asuntos urbanísticos, de accesibilidad y de mobiliario. Asimismo, son cuestiones que responden a cambios, mover cosas de un lado a otro para facilitar determinadas ideas que el Ayuntamiento tiene en mente. “Queremos crear una zona cultural donde se desarrollen actividades, como exposiciones, que encajen allí”, afirma, acerca de una iniciativa que le dará un aire distinto al centro. En esta misma línea, el responsable municipal de Mantenimiento Urbano hace hincapié en la predisposición de la empresa concesionaria del servicio, que atendieron las peticiones de organización. “Se portan muy bien”, puntualiza Padorno.

PARKING ABIERTO. El Ayuntamiento preveía antes del comienzo de las obras que el aparcamiento de la Plaza de la Constitución permaneciera abierto durante el transcurso de las mismas. Hasta el momento, la prestación del servicio no se ha visto interrumpida. Sin embargo, desde hace varias semanas, los usuarios que quieran acceder al aparcamiento deben tomar un desvío que está debidamente indicado en la calle Roldán y Marín, justo antes de la entrada “habitual”. Asimismo, los vehículos deben girar a la izquierda y atravesar la calle del Rastro hasta Virgen de la Capilla, donde, justo a la derecha, pueden entrar al parking por la zona habilitada para la salida. Un semáforo y personal del aparcamiento regulan los turnos para que no haya problemas entre los coches que acceden y los que salen. De esta manera, el servicio prestado por el parking de la Plaza de la Constitución no se vio ni verá interrumpido por las intervenciones en la calle Roldán y Marín.

En otro orden de cosas, el plazo que fijaron desde la propia Administración local antes del inicio de las obras no era superior a cuatro meses. Las precipitaciones retrasaron los trabajos, sí, pero el Ayuntamiento insiste en que a finales de septiembre se recuperarán los días perdidos y la reforma concluirá, previsiblemente, a mediados del mes de noviembre.