Migas y paellas, entre los manjares más demandados en una feria con sello andaluz

Las delicias de San Lucas. Paella y migas, los platos que más se repiten en todas las mesas de comensales repartidas por el recinto ferial. La mayoría de las casetas cuentan con ambos en sus menús diarios y suelen ser de lo más demandados por jiennenses y visitantes. Una feria que para los caseteros resumen de forma positiva con un fin de semana “abarrotado” y con buen tiempo, al que siguió un principio de semana más tranquilo, algo que se suele repetir cada año. Desde ayer, están preparados para acoger a grupos de familiares, amigos y compañeros de trabajo que llenarán las casetas al mediodía para degustar los platos más típicos hasta el domingo. “Es una feria muy participativa y a los jiennenses les gusta comer bien”, manifiesta Antonio Gálvez, cocinero de la caseta cofradía San Ana de Torredelcampo.

Para que todos se vayan con el estómago satisfecho, las plantillas de cocineros se afanan a fondo desde por la mañana para preparar diversas exquisiteces que hacen “la boca agua” nada más verlos. Algunos, como los de la caseta de Diario JAÉN, tienen sus alimentos a la vista para que los participantes puedan contemplarlos con claridad. “Nosotros tenemos aquí un poco de todo, además de paella y migas, gustan mucho las papas a lo pobre”, comenta Fernando Rico, jefe de cocina de la garita. Tan solo tienen una norma a la hora de preparar los distintos menús, que tengan sello andaluz. “Intentamos que sean comidas típicas de nuestra tierra y que los que visiten San Lucas se lleven la sensación de estar en casa”, apostilla Rico. Un estilo parecido siguen en la caseta 30itantos, donde además de los más populares, añaden carnes, como el solomillo al jerez, carne a la suegra o los tradicionales flamenquines. “Las comidas más demandadas se suelen repetir año tras año, esta edición estamos muy contentos y casi todos los días agotamos reservas”, afirma Eduardo Trigo, encargado de barra. Otros productos que nunca fallan y que también tienen “su público” son las chacina: morcilla, chorizo y tocino, suelen marcar el aroma de las calles en el recinto cuando llega la hora de comer.

Entre los comensales, también los hay que prefieren algo de pescado, por lo que los chipirones, la merluza, calamares o boquerones tampoco pueden faltar entre las opciones, así como la fritura con un “poco de todo”. También se pueden incluir como tradicionales las deliciosas tostas de jamón que siempre triunfan y apetecen, así como los flamenquines, dos apuestas andaluzas que todos los días terminan por formar parte de las peticiones de algún grupo que opta por bajar a disfrutar del ambiente festivo. Pero, si hay algo que nunca puede fallar son las tapas. Entre estos entrantes, los más comunes son el jamón, el queso, el lomo y el salchichón, insuperables para “abrir boca” y mucho mejor si vienen con su pan y aceite para mojar. A ello habría que añadir sus aceitunas, sus berenjenas, sus ensaladas, entre otras muchas opciones que hacen de la Feria de San Lucas una fiesta especial con un estilo propio y unos días para disfrutar de la deliciosa gastronomía jiennense.