Los datos de importaciones alertan al sector oleícola

La Unión de Pequeños Agricultores de la provincia cree que la medida “solo beneficia a los especuladores”

11 jul 2019 / 13:00 H.

En la presente campaña de aceituna se produjeron 523.700 toneladas más de oro líquido que en la anterior, cuando la importación fue de más de 160.000 (hasta mayo del año pasado), mientras que, en la presente —con una producción de 1.785.900 toneladas—, una “campaña récord” para la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Jaén, el dato de importaciones ya va por las 103.400. Algo que, para el colectivo, es del todo “inentendible”. “¿De verdad que en una campaña récord de producción necesitamos aceite?”, preguntan retóricamente a través de un mensaje en Twitter.

“¿A quién benefician estas importaciones? A los especuladores”, concluye el tuit. Unas palabras que, en boca del secretario de UPA Jaén, Cristóbal Cano, es una “reflexión que hacen en voz alta”, puesto que “no hay otra manera de entender que, ante tal nivel de producción, los datos de importaciones sean tan altos”. “Que en una campaña como esta los niveles de importación sean superiores a las 100.000 toneladas no responde a una situación a la que podamos buscarle una explicación que no sean intereses que vengan a repercutir positivamente en los agricultores de base”, afirma el secretario provincial de UPA, que evalúa los datos oficiales que publica la Agencia de Información y Control Alimentario (Aica). Unas cifras, en definitiva, que son “inentendibles”. “Más cuando España tiene la producción récord este año y en un contexto mundial en el que se han producido grandes caídas de los países que nos preceden”, afirma.

Ahora bien, Cano se pregunta: “¿A quiénes le interesan esas importaciones?”. “Lo dejamos en el aire. No tenemos la respuesta, pero sí tenemos los datos y esto no viene a sumar para que los agricultores tengamos una retribución justa por nuestra producción”, responde, al mismo tiempo que indica: “No sobra aceite, sobran especuladores”.

MALAS PREVISIONES. La cosecha “no pinta bien” con vistas al año que viene por varias razones. “Partíamos de un invierno seco, las lluvias que tuvimos en abril nos hicieron pensar que tendríamos un año prolífico en lluvias y no ha sido así”, lamenta el secretario de UPA, que continúa: “La primavera, sobre todo los meses de mayo y junio, no ha acompañado con episodios puntuales de altas temperaturas”. Asimismo, nisiquiera un otoño bueno, “por muy bueno que sea”, según declara Cano, hará que la campaña del año que viene sea tan buena como la del presente.

“Las perspectivas son malas y esto se suma a la situación que denunciamos de malos precios. Si las condiciones atmosféricas hubieran acompañado y se estuviera formando una cosecha buena para el próximo año, entenderíamos en parte la caída de precios, pero como no es así...”, lamenta el secretario provincial de UPA.