La noche se escribe con siete jotas de Jiennenses

Testimonio de los premiados con los Jiennenses de Año 2021 del orgullo de ser de Jaén, trabajar en Jaén y por Jaén

25 jun 2022 / 06:00 H.
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El orgullo de ser de Jaén, trabajar en Jaén y por Jaén fue el hilo conductor de los relatos que contaron los premiados como Jiennenses del Año 2021 en la gala de entrega de galardones, celebrada este viernes en la sede corporativa de Diario JAÉN. Incluso de regresar a Jaén tras emigrar para buscarse la vida en otra tierra. Es el caso Silvia Peláez y francisco Romero, de Quesos y Besos, premio Iniciativa. Es lo que ponderó también Javier Marín, director del Festival de Música Antigua de Ubeda y Baeza (Femaub), premio en Cultura, como exponente de un evento cultural especializado y valorado entre las mejores de su género en España. O el esfuerzo y determinación para levantar una familia y una empresa constructora de éxito de la nada, tras un traspiés traicionero de la vida. Fue lo que relató a los asistentes con una admirable sinceridad Juan Manuel Bueno, director gerente de Vialterra Infraestructuras, galardonada en Empresa. La lucidez desde sus 101 años de vida de la pediatra Elena de Marco Farrari, premio en Sociedad. La doctora, una de las siete únicas mujeres que se licenciaron en Medicina en la primera promoción de la posguerra, en Madrid. Que sorteó la brecha que tenía delante por ser mujer opositando y aprobando una y otra vez. Sacó adelante a niños y niñas trabajando durante más de dos décadas en Baeza y otras tres en Jaén. El necesario empuje y los altos vuelos, con espíritu de equipo y amistad del Centro de Vuelo de Pegalajar, una metáfora de remontar muy arriba con el parapente. Tanto que Antonio Lope, uno de sus puntales, avanzó que en 2023 acogerán la Copa del Mundo. Fue el Premio en Deporte. También La iniciativa y el empuje de Oleícola San Francisco, de José Antonio y Manuel Jiménez Molina, para conseguir mantener la seña de identidad de la empresa familiar, hacer el mejor aceite del mudo a juicio del Consejo Oleícola Internacional y abrir camino en el oleoturismo con 50.000 visitas de turistas de 75 países. De ahí el premio en Turismo. Uno de los buenos momentos lo protagonizó, precisamente, José Antonio Jiménez, quien recordó a la doctora De Marco que había sido su pediatra en Baeza. Y la pasión por el trabajo social y la honestidad en su desempeño de la Asociación para la Promoción del Acogimiento Familiar (Apraf) en Jaén, que procura que los menores que lo necesitan por sus adversas circunstancias sociales y familiares tengan una oportunidad con una familia de acogida. Lo explicó su presidente, Juan Antonio García. Premio Valores Humanos

Los premios especiales Mar de Olivo fueron para dos personajes que tienen algo más que el reconocimiento y cariño popular por su trayectorias. Fernando Romay, ex baloncestista internacional, popular donde los haya, y Eva Insanta, actriz versátil, de teatro, cine y televisión, donde se le adora por su papel protagonista en la serie “La que se avecina”, la popular Cuqui. Romay recogió el guante del elogio a la familia que transitó durante la gala desde que lo ponderó como valor básico el presidente de Diario JAÉN S. A., Eleuterio Muñoz en su discurso de bienvenida, y por cada uno de los premiados, para extenderlo hacia el espíritu “de equipo” impregnado del mismo. Romay, que tiene tanta altura como humanidad, derrochó su proverbial buen humor. Y Eva Isanta su vitalidad y naturalidad, con un guiño a esta tierra a través del olivo, árbol que dibujaba de pequeña: como el olivo, hay que tener tronco fuerte, raíces profundas y una copa frondosa, vino a decir a modo de metáfora personal y de la vida.

Conduciendo la gala, el director del periódico, Juan Espejo, sacó un año más su maleta viajera, de la que extrajo letras: las primera decían “Paz”; las segundas, “Pan”. Sus dos mensaje finales, aplaudidos. Después, agradeció a los asistentes su presencia, reiteró felicitaciones a los premiados, miró al cielo y comenzaron los fuegos artificiales. La noche se iluminó, pero antes su nombre se había escrito con siete jotas de Jiennenses.

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