En llamas un vehículo en el casco histórico

Con la noche a punto de dejar paso al nuevo día, los vecinos de la calle Alta de Santa Ana se llevaron un buen susto, puesto que un vehículo echó a arder en la esquina con la calle Carrera de Jesús, junto a uno de los muros perimetrales de la guardería Cervantes. A eso de las siete menos veinte de la madrugada, los Bomberos recibieron el aviso a través del servicio de Emergencias del 112. El coche, según indican fuentes municipales a este periódico, estaba totalmente calcinado cuando los Bomberos llegaron a dicha zona.

Asimismo, se encontraba aparcado junto a la Escuela Municipal Infantil Cervantes y, a causa de las llamas, se vio afectado uno de los muros de la guardería. La dotación que se necesitó para sofocar las llamas que quedaban fue de dos bombas urbanas —una pesada y otra ligera— y seis agentes. Hasta allí se desplazó también la Policía Local para ofrecer más seguridad tras el suceso. Hasta el momento, tal y como indican las mismas fuentes, se desconocen las causas por las que se produjo el incendio.

Este no fue más que el punto final a una noche cuanto menos agitada para los bomberos. El primer servicio destacado que tuvieron que acometer fue la retirada de un enjambre en un árbol de una de las arterias de la capital, la Avenida de Madrid, a la que ya habían acudido anteriormente para su inspección con una Unidad 16. Sin mayores complicaciones, se procedió a retirar el enjambre y se depositaron las abejas que en él habían en apiario en paraje natural.

Más tarde, la Unidad 9 tuvo que intervenir en un accidente en el casco urbano. Un total de tres agentes hicieron falta para resolver el problema ocasionado por una colisión entre un turismo y una motocicleta en la Carretera de Madrid. Con el confinamiento se ha reducido el número de coches en las carreteras de la ciudad y del resto de municipios de la provincia. No obstante, el riesgo de accidente, aunque menor, siempre está hay. No se registraron heridos.