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La tuna universitaria del distrito de Jaén lleva la alegría y los villancicos a diferentes lugares en el Día de Reyes

06 ene 2020 / 12:02 H.
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Con la garganta preparada y listos para disfrutar de un día en el que la música y el cante fueron los principales protagonistas. Así comenzaron el Día de Reyes los miembros de la tuna universitaria del distrito de Jaén, que aprovecharon esta jornada tan mágica y especial para hacer lo que más les gusta: salir a la calle para animar a bailar y cantar a todas las personas con las que se encontraron en la calle.

El primer destino lo tenían claro: los bares y las tascas del centro de la ciudad. Así, se pasearon por los diferentes locales, interpretando los villancicos más tradicionales y famosos de estas fiestas y animando a las personas a entonar con ellos las letras. Un rato de música, diversión y, sobre todo, alegría, que siempre acompaña a estas canciones tan típicas de la Navidad.

Desde hacía varios días, los integrantes de la tuna universitaria tenían claro que querían disfrutar de este día como el que más y, por eso, elaboraron un programa propio con diferentes visitas y actividades. Tras su paso por los bares del centro de la ciudad, se dirigieron hacia el la iglesia de La Merced, donde acompañaron a la Asociación de Celíacos de Jaén (Apeceja) , que, con motivo de este día, entregaron chucherías y caramelos si gluten a todos los niños que se acercaron a la parroquia, donde también estuvieron presentes Melchor, Gaspar y Baltasar. De esta forma, se vivió un ambiente mágico, en el que los más pequeños también cantaron los tradicionales villancicos de Navidad.

El siguiente destino para la tuna universitaria del distrito de Jaén fue el Real Monasterio de Santa Clara, donde fueron a visitar a las monjas claristas para vivir, con ellas, unos minutos de convivencia y alegría. Por supuesto, no faltaron las melodías tradicionales, no solo en el ámbito nacional, sino también las de Jaén, puesto que en el convento hay hermanas que son de otros países. Así, este fue el momento ideal para que conociesen otras costumbres y culturas a través de estas fiestas tan entrañables y familiares.

El broche dorado al Día de Reyes llegó después de la cabalgata que recorrió las principales calles de la capital. Fue entonces cuando, acompañados por los Reyes Magos, se desplazaron hasta el Hospital Materno Infantil para visitar a los niños que se encuentran hospitalizados. Una actividad que hacen desde hace más de treinta años.

Con ella, la tuna universitaria del distrito de Jaén puso punto final a unas navidades en las que apenas han parado y han vivido con alegría e intensidad. De hecho, en Nochebuena, visitaron la asociación de vecinos La Merced para también disfrutar con ellos de un rato de cante.

La tuna de Jaén es la entidad más antigua de la Universidad de Jaén, y haciendo honor a su título de andariega han recorrido los caminos de los cinco continentes para llevar su música.

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