Pesimismo
ante la propuesta económica del plan de paz

El plan económico de Jared Kushner para la paz en Oriente Próximo, yerno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como parte de un proyecto más amplio que tiene como objetivo resolver el conflicto palestino-israelí fue acogida con escepticismo por la mayor parte de los estados árabes por considerarlo una ofensa más hacia los palestinos y una solución errónea que pretende compensar injusticias históricas a golpe de billetera.

Este plan planea crear un “fondo global” de 50.000 millones de dólares a repartir en diez años entre proyectos de desarrollo e infraestructura en los territorios ocupados y en países árabes como Jordania para consolidar el estatus de los refugiados palestinos que acogen. Sin embargo, la ausencia de una solución política, que Washington ha anunciado que revelaría más tarde, provocando el rechazo no sólo de los palestinos, sino también de los países árabes con los que Israel buscaría mantener relaciones estables.