El atentado de Niza deja 84 fallecidos y 50 heridos “entre la vida y la muerte”

La cifra inicial de fallecidos no dejó de crecer tras las horas del brutal ataque en Niza. El Ministerio del Interior francés elevó a primera hora de este viernes a 84 los muertos en el atentado. Además, el presidente de Francia, François Hollande, informó de que unas 50 personas heridas se encuentran “entre la vida y la muerte”, por lo que las autoridades no descartan que aumente la cifra. Hasta 188 personas fueron atendidas.

El mandatario francés explicó que, entre las víctimas, figuran franceses pero “también muchos extranjeros” y “muchos niños”. Hollande se reunió con algunos de los heridos, muchos de los cuales “arrastrarán toda su vida el trauma” de lo vivido durante la fiesta nacional. “¿Por qué Niza? Porque es una localidad mundialmente conocida. Una de las ciudades más bonitas del mundo”, destacó Hollande. “¿Por qué el 14 de julio? Porque es la fiesta de la libertad”, lamentó, confiado en que Francia será capaz de “superar las pruebas” si encara con “unidad” las amenazas futuras.

El autor del atentado fue identificado como Mohamed Lahouaiej Bouhlel, un conductor profesional de 31 años y de origen tunecino, cuyo apartamento en el sector norte de la ciudad fue escenario de un registro policial en las últimas horas. Según el diario local “Nice Matin”, Bouhlel es el titular del carné de conducir que la Policía encontró en el interior del camión. Bouhlel, casado y padre de tres hijos, estaba fichado como delincuente común pero hasta ahora no se tenía constancia de que se hubiera radicalizado en una red terrorista. Había sido detenido recientemente tras un altercado tras un incidente de tráfico, según recoge Europa Press del periódico “Le Monde”. Fuentes de seguridad tunecinas citadas por la agencia de noticias Reuters aseguraron que no tenía ningún antecedente penal en el país norteafricano.

El primer ministro francés, Manuel Valls, consideró “innegable” que el atropello masivo en Niza “es un ataque terrorista”, al tiempo que insistió en que hay una “guerra” declarada contra Francia. “Nos han declarado la guerra pero la vamos a gestionar nosotros”, afirmó en una entrevista concedida a la televisión francesa, repitiendo las palabras del presidente galo, François Hollande, tras los atentados de París. Sin embargo, horas después, el ministro de Interior francés, Bernard Cazeneuve, confirmó que el responsable del atropello masivo de Niza, Mohamed Lahouaiej Bouhlel, no tenía antecedentes por “islamismo radical” y aclaró que, por el momento, las autoridades no pueden asegurar que se trate de un atentado yihadista.

El responsable de Interior recordó que Bouhlel “no era conocido por hechos vinculados al islamismo radical”, sino por un altercado menor relacionado con accidente de tráfico. Ningún grupo reivindicó la autoría del ataque, que sí ha sido celebrado en redes sociales por seguidores de la organización Estado Islámico. Cazeneuve defendió las medidas de vigilancia aplicadas por las autoridades franceses, si bien admitió que no existe “el riesgo cero”. En este sentido, también alabó la labor de las fuerzas de seguridad. “Sin nuestra determinación, habría muertos permanentemente”, añadió el ministro, que cifró en 16 el número de atentados desarticulados en los últimos meses.

Tras el suceso, se dio a conocer que el Estado Islámico pidió en 2014 que sus seguidores atentaran contra franceses con cualquier arma. Abú Muhamad al Adnani, portavoz de Estado Islámico, hizo un llamamiento para que los seguidores del grupo terrorista atacaran a ciudadanos occidentales, con cualquier arma que tuvieran a su alcance, incluido el método del atropello. “Si no podéis encontrar una bomba o una bala, destrozadles la cabeza con una piedra o asesinarles con un cuchillo, atropelladlos con vuestro coche, tiradlos desde un lugar alto, estranguladlos o envenenadlos”, afirmó entonces Al Adnani, en su llamamiento a matar a occidentales, incluidos los “despreciables” franceses.