¿Akihito dice adiós?

El emperador de Japón baraja abdicar, una decisión sin precedentes en su país

09 ago 2016 / 10:30 H.

El emperador Akihito de Japón aseguró este lunes estar “preocupado” por la posibilidad de que el gradual deterioro de su salud termine impidiéndole continuar cumpliendo con sus deberes de jefe de Estado, como ha estado haciendo hasta ahora. “Como considero que mi nivel de salud está disminuyendo gradualmente, me preocupa que pueda llegar a ser difícil para mí cumplir mis deberes como símbolo del estado con plena capacidad, como he hecho hasta este momento”, asegura el emperador japonés, en un discurso emitido por la cadena de televisión pública NHK.

NHK informó en julio de que Akihito, que se sometió a una operación de corazón y recibió tratamiento médico por cáncer de próstata, podría querer abdicar en los próximos años, una decisión que no tiene precedentes en la historia de Japón. La figura del emperador, que en su día llegó a ser considerada divina, está definida en la Constitución de Japón como un símbolo del Estado y de la unidad del pueblo nipón, y carece de competencias políticas. En su mensaje, Akihito no dijo explícitamente que quiera abdicar, un mensaje que podría ser interpretado como una intromisión en las decisiones de los políticos.

La abdicación imperial no está contemplada en la legislación japonesa, de modo que las autoridades niponas se verían obligadas a improvisar. La base más conservadora del Gobierno de Shinzo Abe se opone a tal medida.

Akihito, de 82 años de edad, ha tenido que ser ingresado varias veces en los últimos años por diversas dolencias, razón que le habría empujado a sopesar la abdicación a favor del príncipe heredero, Naruhito, de 56 años. El traspaso de poder podría reavivar el debate sobre la sucesión imperial. Actualmente, solo es posible entre varones, pero Naruhito solo tiene una hija, así que, con las actuales leyes, tras él el Trono del Crisantemo pasaría a su hermano, Akishino, y a su sobrino, Hisahito. Será la segunda vez que el emperador se dirija al pueblo japonés en un mensaje de vídeo. La primera fue tras el terremoto y el tsunami que el 11 de marzo de 2011 sacudieron las costas del país.

Por otro lado, el Gobierno japonés ordenó este lunes a sus Fuerzas Armadas que estén preparadas de forma permanente para derribar cualquier proyectil que se dirija contra territorio nipón, tras el último lanzamiento de misiles balísticos realizado por parte de Corea del Norte.

La nueva ministra de Defensa, Tomomi Inada, pone en alerta a las llamadas Fuerza de Autodefensa, advirtiendo de que el régimen de Kim Jong Un podría atacar de nuevo el país asiático, según la agencia de noticias nipón. Hasta ahora, el Gobierno de Shinzo Abe había emitido órdenes de alerta temporales cuando tenía indicios de un inminente lanzamiento de misiles balísticos por parte de Corea del Norte, que cancelaba después de que se efectuaran. Las autoridades norcoreanas lanzaron la semana pasada dos misiles balísticos, uno de los cuales cayó en aguas territoriales de Japón, siendo la primera vez que el régimen comunista alcanza un país vecino.