Real Jaén. Dos históricos en horas bajas

El Real Jaén y el Cádiz protagonizan un duelo de emergencia en La Victoria. Los locales afrontan la cita sin su técnico, José Miguel Campos, sancionado sin empleo y sueldo, y con Manuel Herrero como delegado en el banquillo. Los amarillos, con dos derrotas consecutivas, también padecen deudas y denuncias.        

    09 ene 2011 / 09:59 H.

    Dos históricos del fútbol español, víctimas del lastre económico, enfrentan su capacidad de supervivencia. Al Real Jaén, convertido en avispero, lo marea tanto zumbido. No hay respiro en la entidad esta temporada. La estruendosa victoria ante el Roquetas, por la forma —el mejor partido del ejercicio— y el fondo —la fulgurante irrupción de Iván—  apenas tuvo eco. El conflicto entre la entidad y el técnico, José Miguel Campos, propició otro capítulo desagradable culminado con el expediente de empleo y sueldo al murciano. Manuel Herrero, segundo entrenador, asume las funciones de forma oficiosa. No es la primera vez que el iliturgitano ejerce de “apagafuegos”. Ya dirigió un partido en El Ejido en la transición entre el adiós de Terrazas y la bienvenida a Álvaro Cervera y, esta campaña, ha ejecutado órdenes con Campos sancionado en la grada. Herrero apela a la profesionalidad de la plantilla, de curtida experiencia con viento en contra, para buscar la segunda victoria consecutiva en casa. Ubicado en la decimocuarta plaza, el Real Jaén necesita abrir distancia con la promoción de descenso. Lo hace con las ausencias de Galera, Toledo y Valdés, lesionados,  y el regreso de Fran Machado, que ya ha cumplido sanción. El armillero se perfila en la suplencia. La exhibición de Iván, eléctrico contra el Roquetas, presagia la titularidad del canterano, el único rayo de esperanza entre tanto nubarrón.
    Tampoco el Cádiz contempla el cielo despejado. La entidad amarilla, recién descendida al pozo, necesita el ascenso para salvar una situación crítica. Su deuda refleja cifras abismales, también sufre denuncias de futbolistas —el jiennense Álvaro Silva y Cifuentes— y su principal aval, la afición, empieza a ausentarse en el Estadio Ramón de Carranza en señal de protesta por la gestión de la directiva. A todo ello suma una trayectoria de altibajos en la competición, con estados de euforia que delegan en depresiones. Una de ellas le costó el puesto al técnico Hristo Vidakovic, relevado en el cargo por José González. La llegada del gaditano —sustituto de Campos en el Real Murcia— reactivó al equipo, que ahora vuelve a enlazar dos derrotas, ante el Roquetas y el Melilla. Pese a su irregularidad, el Cádiz siempre impone respeto. Futbolistas como Aarón Bueno, ex del Ceuta, o el incombustible Pachón, ambos con seis tantos, desequilibran en la categoría.
    Hoy, en el medio día del club, algo está garantizado en La Victoria: el olor a clásico y el estado de urgencia en los dos conjuntos. Al Real Jaén, a expensas del marcador, siempre le quedará la taquilla.   José Ramón Casado / Jaén