Ajedrez.- Carlsen gana a Grischuk y le da otra dimensión a la recta final del torneo
El “Mozart del ajedrez”, Magnus Carlsen se impuso al líder de la competición en un magistral encuentro en el que dejó constancia de su buen hacer ante el tablero. Al acabar el resto de los encuentros en tablas, el noruego se convierte en un serio aspirante al primer puesto cerca del final del torneo.
La vigésimosexta edición del Torneo Intercontinental de Ajedrez Ciudad de Linares alcanza su recta final con una dimensión en la clasificación de lo más interesante, ya que el benjamín de la competición, Magnus Carlsen, se impuso al líder, Alexander Grischuk, en un elegante encuentro que le hace quedar a tan sólo medio punto de la cabeza de la clasificación.
La vigésimosexta edición del Torneo Intercontinental de Ajedrez Ciudad de Linares alcanza su recta final con una dimensión en la clasificación de lo más interesante, ya que el benjamín de la competición, Magnus Carlsen, se impuso al líder, Alexander Grischuk, en un elegante encuentro que le hace quedar a tan sólo medio punto de la cabeza de la clasificación.
En su duelo ante el ruso, el noruego comenzó con una defensa siciliana que desencadenó un cara a cara en el que un caballo blanco bien posicionado acosó a las torres contrarias. Este hecho le concedió una ventaja que aprovechó con un peón pasado en la columna D que provocó que, después del cambio de damas y de que el Mozart del deporte ciencia entregase la calidad, el joven gran maestro rematase con la entrega de un alfil antes de que su contrincante admitiese la derrota en el movimiento 37.
Por su parte, el segundo clasificado, Vassily Ivanchuk, plantó cara con negras al campeón del mundo, Viswanathan Anand, en una batalla que llevó a un igualado final de piezas menores en el que el indio tenía un peón de ventaja que, al ser de alfiles de distinto color, no supuso una diferencia considerable a la hora de acordar el empate a los 32 movimientos. La partida de Levon Aronian y Wang Yue, que comenzó con una apertura caro-kann, acabó con el rey blanco desprotegido ante los jaques de la dama negra que impidieron que el armenio siguiese el camino de la victoria. El maestro chino se mantuvo en su línea de jugar a no perder y se firmaron las tablas en el movimiento 31.
El encuentro más largo fue el de Leinier Domínguez y Teimour Radjabov, que arrancó con una defensa siciliana del cubano en el que un peón blanco pasado podría haber causado mucho daño de no verse bloqueado por un caballo contrario. En un final de torres con una cadena de peones bien defendida por parte de Domínguez, no hubo más remedio que firmar la igualada. M. J. Velasco /Linares