Victoria con la mente puesta en la Copa del Rey

El juego del Real Jaén ha perdido brillo en La Victoria y ya no es el equipo que pasaba por encima de sus rivales con un fútbol en el que combinaba todos los registros con toque, posesión y transiciones rápidas. La Copa del Rey es inminente y la plantilla vive con ilusión enfrentarse con un Primera División como es el Deportivo Alavés, pero la Liga es importante para el colectivo y la entidad. En una competición que, por el momento, vive la dictadura del Linares, el Real Jaén quiere asentarse entre los cuatro primeros clasificados. Los tres puntos sumados ante el Maracena son importantes, porque permiten que equipo blanco hay dormido segundo en una jornada del sábado en la que se benefició de las derrotas del Motril y del Antequera. La primera mitad fue un monólogo blanco de ocasiones. Fran Hernández tiene un guante su pierna y cada acción de estrategia es una ocasión clara para el Real Jaén. El granadino ofreció una clase de ejecución de faltas. Las lanzó de forma deliciosa, con elegancia y en las tres buscó la escuadra de la meta de Darío. El portero y el larguero evitaron que el Real Jaén sentenciara antes el partido. Hernández tuvo protagonismo en el primer gol blanco. Asistió a Juanca con un toque sutil y el cazalillero superó a Darío con un perfecto remate de cabeza. El gol llegó en un contraataque de manual de los blancos en tres pases y después de que Juanjo salvara bajo la línea una ocasión en una acción que protestó el técnico visitante al entender que Sosa había golpeado el balón con la mano. El gol llegó en la última acción de una primera mitad áspera por el serio e intenso planteamientos de los visitantes.

El segundo periodo fue aburrido. El Real Jaén se conformó en algunos momentos con la mínima ventaja y se refugió en la buena labor en el centro del campo de Gabri Cortés, un trabajador nato que, incluso, dispuso de una opción para marcar en un disparo cercano en una posición complicada. El Maracena salió con ímpetu y forzó dos acciones de estrategia que resolvió De la Calzada y sus compañeros de línea defensivo, pero a los granadinos les faltó firmeza y determinación frente a a un Real Jaén sin continuidad. En el tramo decisivo llegó el segundo gol firmado por Sosa en un certero remate de cabeza. De no entrar casi en los planes de González a disfrutar minutos de calidad. Resolver el partido le permitió al entrenador a mover el banquillo para afrontar con garantías el compromiso de la Copa del Rey, donde el fútbol de Primera volverá a La Victoria seis años después.

La Liga también interesa y el último partido de 2019 de esta competición en casa se resolvió con un triunfo. Los blancos siguen invictos en su campo y solo el Ciudad de Torredonjimeno ha sido capaz de puntuar. Esa buena dinámica como local se quiere mantener.