La ilusión como método integrador

El actor Jesús Vidal participa como ponente en las II Jornadas Inclusivas de la Universidad

26 abr 2019 / 11:49 H.

La consecución del Premio Goya al Mejor Actor Revelación en 2018 por su actuación en la también galardonada y ya famosísima película “Campeones” le catapultó al estrellato; sin embargo, la de Jesús Vidal era una historia marcada por el afán de superación y por el éxito desde hacía bastante tiempo. Con paciencia, con ilusión y con optimismo consiguió, a pesar de tener una discapacidad visual del 90 por ciento por miopía patológica, licenciarse en Filología Hispánica y cursar un máster de Periodismo antes de dedicar su vida a la interpretación.

Su discurso en la gala de los premios del cine español emocionó a todos por el tono candoroso, sincero y emocionado de su mensaje reivindicativo en pro de la integración social de personas con discapacidad. Y precisamente para seguir difundiendo dicha idea acudió ayer a la Universidad de Jaén, merced a la labor previa de su Consejo de Estudiantes. En el Salón de Grados del edificio A3 de la misma, participó como ponente en el marco de las II Jornadas “Por una Universidad más inclusiva”, un papel que asumió con la misma naturalidad con la que de seguro decidió enfrentarse hace mucho a las barreras que las convenciones sociales le tenían ya reservadas durante el transcurso de su camino vital.

El citado salón se llenó de estudiantes universitarios, entre los que se encontraban usuarios del programa UniverDi, para escuchar las palabras de Vidal. En la mesa le acompañaron la directora de Secretariado de Becas, Ayudas y Atención al Estudiante, María Luisa Quijano; el gestor cultural y crítico cinematográfico Enrique Iznaola, y el rector de la Universidad, Juan Gómez, que dio las gracias al actor por su visita y al Consejo de Estudiantes por el trabajo realizado.

En su intervención, Vidal lanzó un mensaje de optimismo a las personas con discapacidad que decidan emprender cualquier reto desafío académico y laboral: “Lo que les tiene que importar es el esfuerzo, el tesón y el talento. Con esas tres cosas, todos sus sueños profesionales y personales pueden hacerse realidad”.

Aunque señaló que, en cuanto a inclusión social, “a la universidad aún le quedan pasos que dar”, reconoció que “van en la buena dirección”: “Siempre se pide más, pero hay que valorar lo que se está haciendo”.