“Crónicas” refleja los efectos de los residuos en Andújar

El espacio de reportajes de La 2 se centra en la fábrica Hernández Vidal

11 mar 2019 / 13:11 H.

Crónicas”, el programa de reportajes de producción propia emitido de manera quincenal en La 2, y enfocado a mostrar la realidad de la sociedad española, abordó durante su última entrega el origen y las consecuencias humanas, medioambientales, económicas y sociales que provoca el uso pasado y presente de la energía nuclear. De este modo, el espacio de la cadena pública repasó la historia de la Fábrica de Uranio de Andújar y sus posibles efectos en la salud de sus antiguos trabajadores, como reflejo de una época y un régimen con grandes aspiraciones políticas.

Los testimonios de José Soto, presidente de la Asociación de Extrabajadores de la Fábrica de Uranio de Andújar, y de Pablo Utrera, autor del libro “El sueño de Franco, la pesadilla de Andújar”, son el hilo conductor de un reportaje que se remonta hasta la inauguración de la fábrica General Hernández Vidal, destinada a producir concentrados de uranio desde 1959 hasta 1981 sin que sus 126 trabajadores dispusieran de las medidas necesarias de protección, salvo en ocasiones puntuales, que evitaran su exposición prolongada a los residuos radioactivos que causaron la muerte de la mayoría de ellos con el paso de los años como consecuencia del desconocimiento y la falta de información. Constituídos como asociación, estos mismos empleados reclaman el reconocimiento de enfermedad laboral y que no se traten sus dolencias como casos de patologías comunes. De los 126 trabajadores que tuvo la fábrica en su día, hoy a penas quedan quince vivos. Durante casi 30 años, han recopilado numerosa documentación e informes médicos que respaldan sus peticiones, abaladas también por distintos estudios epidemiológicos que señalan que la exposición reiterada al uranio puede favorecer la aparición de ciertas patologías.

La fábrica de Andújar, destinada en principio a tratar los minerales de las minas descubiertas en la zona del Cabezo y alrededores, albergaba la esperanza del régimen franquista de dotar a España de su propio arsenal nuclear, pero finalmente fue una pesadilla para el municipio jiennense que vio cómo en 1986, la recién creada Enresa, enterraba los residuos en un dique junto a los equipos, instalaciones y oficinas que conformaban la planta.

El reportaje, dirigido por Matías Montero y producido por Ana Pastor, también aborda la problemática legal y medioambiental para el ecosistema de la zona debido al enterramiento de los residuos generados por centrales nucleares cuyo cierre se contempla en la apuesta por las renovables.