Intimísimo y muy sentido pregón de Semana Santa

Aurelio Cabello tuvo palabras para todas las cofradías locales en un discurso cargado de emotividad

08 abr 2019 / 16:07 H.

Martos ya huele a Semana Santa. A pesar de que aún restan varios días para que las procesiones de la ciudad tuccitana comiencen a recorrer sus calles, ya puede advertirse cierto aroma a incienso en cada esquina, cierto eco de cornetas y tambores y un cierto hormigueo en el pecho. En ese contexto y con la habitual expectación de los fieles por el inminente inicio de la Semana de Pasión, acrecentada tras la suspensión del traslado de imágenes del via-crucis Jubilar Aurelio Cabello se convirtió en la voz de todos los fieles marteños a la hora de expresar ese cúmulo de emociones tan a flor de piel entre los vecinos. El marteño fue el encargado de pronunciar el Pregón de la Semana Santa de Martos de este 2019. El acto tuvo lugar en el Teatro Municipal Maestro Álvarez Alonso al que acudieron cofrades y fieles marteños deseosos de aplacar, en la medida de lo posible, sus ansias de Semana Santa.

Abraham y Eva María Cabello, hijos del pregonero, se encargaron de presentar a su padre, cuya trayectoria cofrade era aval suficiente para justificar que la Unión Local de Cofradías depositara en él la confianza para asumir la responsabilidad de ejercer de pregonero. Entre otros aspectos, Cabello es miembro de la Junta de Gobierno de la cofradía de San Juan Evangelista desde hace 35 años, ha sido vicepresidente de la Unión Local de Cofradías, es hermano de la hermandad del Nazareno y cofrade costalero de Santa Marta.

Sirviéndose tanto de la prosa como del verso, Cabello, tras introducir su discurso hablando del periodo cuaresmal, hizo un recorrido por la Semana Santa marteña en el que tuvo palabras para todas y cada una de las cofradías locales. Un particular tono intimista que bañó las palabras del pregonero, que estableció un diálogo con cristos y vírgenes en el que desnudó su sentimiento cofrade. No obstante, la parte más emotiva del pregón, llegó cuando Cabello evocó la figura de su padre, ya fallecido, antes de dar término a un aplaudido discurso cofrade.