Un gran escaparate de la Iglesia para clausurar el Año de la Misión

20 oct 2019 / 11:18 H.

Sacar la Iglesia de Jaén de los propios templos”. Con este objetivo surgió la Feria de la Fe, iniciativa diocesana promovida por el obispo, Amadeo Rodríguez Magro. Un encuentro para creyentes y una oportunidad para compartir momentos de oración, distintos puntos de vista y clausurar al Año de la Misión. Para ello, contó en las instalaciones de Ferias Jaén con 20.000 metros cuadrados, 500 voluntarios y más de 50 estands donde se expuso la realidad de la Iglesia, desde todas sus perspectivas.

La jornada comenzó con un momento para la oración al que siguió la inauguración en la que además del obispo de Jaén, estuvieron presentes el deán de la Catedral, Francisco Juan Martínez Rojas; el presidente de la Diputación, Francisco Reyes; el alcalde de Jaén, Julio Millán; la primera teniente de alcalde y concejal de Presidencia, África Colomo, y la subdelegada del Gobierno, Catalina Madueño. “Estoy muy feliz por la repercusión que esta iniciativa ha tenido entre la ciudadanía”, comentó el obispo, a lo que añadió: “Hemos venido a esta feria a mostrar lo que tenemos, nosotros creemos en Jesucristo y queremos ofrecérselo a la gente para que sean felices que es nuestra máxima preocupación”. Junto a los representantes de la Iglesia y la ciudadanía, los más de ocho visitantes se repartieron por las distintas zonas en las que se dividió la feria: La Montaña de las Bienaventuranzas, dedicada a la evangelización y al primer anuncio; El Parque del Sosiego, donde estuvieron ubicados los estands dedicados a la parte litúrgica de la Iglesia; El Puente del Consuelo, un gran espacio dedicado a la caridad desde todas sus aspectos; la Barriada de la Comunión, como un signo de unidad en el mundo.

Junto a estos espacios, la feria contó con música cristiana en directo, donde siete cantautores y grupos cristianos ofrecieron conciertos durante toda la jornada, como fue el caso del grupo Mavelé. La historia de la Iglesia de Jaén también tuvo su protagonismo en “El Palacio de la Historia”, que contó con una muestra del arte y patrimonio de la Iglesia de Jaén a lo largo de los siglos, así como conferencias sobre la historia de la fe desde sus inicios hasta la actualidad. Por otra parte, se habilitó una zona para dar testimonio de las vivencias como Iglesia. Un completo y variado escaparate en el que los visitantes se volcaron de lleno, con un gran interés en cada una de las zonas habilitadas y una alta predisposición a la participación, pues fueron muchas las actividades que requirieron de ella. Un juego de pasapalabra inspirado en la Iglesia, escritos personales sobre la visión de los creyentes de la propia institución y hasta un mago fueron algunas de las actividades que no cesaron en toda la jornada. También hubo espacio para aquellas empresas que ofrecen artículos relacionados con la cristiandad, tales como “Aguilar artículos religiosos”, que mostró sus productos, entre los que destacan los inciensos y los ornamentos religiosos.

Una de los estands más curiosos fue el protagonizado por dos niñas, Ana María Ramírez y Nuria Cano. “Queremos que los niños disfruten de la feria mientras nosotras les explicamos algunos de los conceptos más importantes de la iglesia católica”, describió una de las jóvenes, que además invitó a participar a todos los creyentes en varias cartulinas donde pudieron dejar su huella con pinturas de colores. La Feria de la Fe se clausuró con El Ángelus; el rosario misionero y la eucaristía, como conclusión al Año de la Misión.