Más de 1.800 opositores se abren camino para cumplir sus sueños

Los jiennenses se presentan a las pruebas para convertirse en profesores

25 jun 2018 / 08:33 H.

Silencio, un par de bolígrafos y una hoja de papel donde están los sueños y el futuro de muchos jiennenses. Las oposiciones a Secundaria reunieron, en los aularios de la Universidad de Jaén, a más de mil personas que, ya fuera su primera vez, la segunda o, por qué no, la cuarta, lucharon, con todo lo que tenían, por conseguir una de las ansiadas plazas para convertirse en profesores.

Fue una completa lotería. El azar fue el que decidió los temas que gastarían la tinta de los bolígrafos de los opositores. Cinco bolas y cinco temas que también pusieron a prueba la suerte de los jiennenses durante este día y, fue solo una pequeña cantidad de ellos la que no superó este primer “obstáculo”. Son muchos los estudiantes a oposiciones los que optan por, en lugar de prepararse el extenso contenido que exigen para los exámenes —que puede llega a los setenta temas—, estudiar tan solo la mitad o una parte implorando a la diosa de la Suerte a que interceda por ellos. Sin embargo, algunas de estas plegarias no son escuchadas y, a pesar de las cinco opciones, no son capaces de enfrentarse a la prueba escrita por carecer de la base necesaria. Por su parte, los muchos que se quedaron se enfrentaron a un examen de cuatro horas que, para algunos, se quedaron un poco cortas.

Para afrontar este momento, muchos jiennenses fueron hasta la UJA acompañados de sus familiares y amigos, quienes esperaron impacientes a volver a verlos en los pocos recovecos de sombra que había en el campus. Cientos de acompañantes que, en ocasiones, parecían incluso más nerviosos que los propios opositores y entre los que se escucharon frases “de consuelo” como: “Si lleva más de dos horas dentro es que no le irá tan mal”. Y, una vez que los examinados salían por las puertas acristaladas de los edificios de la UJA, hubo una escena que se repetía en todos: un enorme abrazo, tanto de alegría como de consuelo.

Así, las oposiciones a Secundaria de este año se desarrollaron sin ninguna incidencia desde las nueve de la mañana, hora a la que comenzaron los exámenes. José Manuel Castellano, secretario general provincial de la Delegación Territorial de Educación en Jaén, destacó que, a pesar de que esperaban a unos 2.300 opositores para esta edición, se presentaron 1.877. “No sabemos si alguno ha faltado, pero, en teoría, estuvieron todos los que fueron a la presentación del sábado en el campus”, añadió. En esta ocasión, fue la especialidad de Geografía e Historia la que tuvo un mayor protagonismo en el número de plazas, pues a Jaén se destinaron 315 en total y cuatro tribunales. Castellano también recalcó que especialidades como Matemáticas y Lengua Castellana y Literatura también obtuvieron un amplio número de plazas, 251 y 242, respectivamente.

“En los opositores se ve todo, pero, este año, observamos que hubo muchos jóvenes y, para algunos, es su primera oposición, por lo que vienen muy nerviosos”, continuó José Manuel Castellano. Sin embargo, aclaró que todos ellos “siempre vienen con ánimos y con la gran ilusión de obtener una plaza”. Aquellos que se presentaron este año a las oposiciones a Secundaria pudieron beneficiarse de que, en esta ocasión, hubo un gran porcentaje de plazas. “Las plazas para cada opositor son pequeñitas, es decir, que tienen que luchar con poca gente. Así que esperamos que todos tengan grandes posibilidades, porque se han sacado muchas plazas en toda Andalucía, un total de 5.500”, explicó el secretario. De este número, Jaén representa, con respecto al resto de la comunidad, tan solo un 10% en proporción. “Es el porcentaje que le toca a la provincia y, este año, se ha respetado”, comentó Castellano, quien apuntó que, esta vez, se presentaron “muchos jóvenes, pero, lógicamente, también vinieron los que ya llevan tiempo trabajando como interinos. Pero hubo un alto porcentaje de jóvenes jiennenses que se presentan este año por primera vez”.

Delante de todos estos jóvenes, vigilantes de que todo saliera de la forma más correcta, estuvieron los miembros de los tribunales asignados a cada especialidad. Manuel Jesús Membrera fue uno de ellos y formó parte del Tribunal de Lengua Castellana y Literatura. “Los opositores de este año parecen venir muy bien. En el examen estuvieron muy concentrados y en el sorteo salieron temas que gustaron”, expresó Membrera. Según dijo, salieron cinco temas entre los que hubo dos de literatura, “bastante asequibles”, uno del teatro y otro de los cantares de gesta, y tres lingüísticos. “De hecho, hubo mucha gente que se alegró cuando vio los de literatura”, aclaró. Asimismo, señaló que, salvo dos o tres personas, el resto de opositores se quedaron todos haciendo el examen. “Estamos muy contentos porque vemos a la gente de este año muy animada”, declaró.