Jiennense del Año 2023: Daniel Rodríguez, el éxito basado en la sencillez

Es el responsable técnico de los éxitos del Jaén Paraíso Interior FS, al que ha guiado desde el banquillo a conquistar el título de campeón de la Copa de España en los años 2015, 2018 y 2023. Se le iluminan los ojos cuando habla de su club o se sumerge en el túnel del tiempo para recordar sus comienzos o su primer contacto con el balón cuando era niño en el barrio de Peñamefécit, donde su madre tenía un quiosco de polos y helados. Daniel Rodríguez Martínez (Jaén, 2 de abril de 1978) a sus 46 años conoce todos los entresijos de fútbol sala. Destacó como jugador y ahí ya demostró su capacidad de liderazgo en las pistas en el Distrito 2, filial del Jaén FS en la década de los 90, con el mítico Adolfo Boni como entrenador. El brasileño, que formó una pareja letal con Douglas Sinigoi, le inculcó valores importantes que después Rodríguez aprovechó para desarrollar y completar una trayectoria de 17 temporadas entre Primera y Segunda División.

Empezó en el Jaén FS —en su época se denominaba Alvic— y la terminó en casa en 2011 cuando llegó como refuerzo al Fuconsa para lograr la permanencia. Jugó también en el Ceuta FS, el O Parrulo, el Adecor Grupo Pinar, el Burela Pescados Rubén, el Bujalance y el Zamora. Tuvo el honor de vestir la camiseta de la selección española en el Mundial Universitario. Todo cambió el 29 de junio de 2011. El jerezano Carlos César Núñez decidió no continuar como técnico al recibir una importante oferta de Italia. Nicolás Sabariego, por aquel entonces presidente del club, encontró el sustituto en casa y le ofreció el cargo a Daniel Rodríguez que, con 33 años, cambió la pista por el banquillo, pese a las presiones familiares por seguir como jugador. Desde ese día comenzó a diseñarse el Jaén FS del futuro. Lo pasos ya fueron ambiciosos y empezaron con un play off de ascenso a Primera División en la campaña 2011/2012, en el que los jiennenses fueron eliminados por el Sala 5 Martorell en el tercer partido. Toño, Lolo Jarque, Minu, José López, Lonchu, Kike Barroso, Miguel Ángel Ureña, Sergio García, Víctor Martos, Miguelín, Solano y Emilio Buendía fueron algunos de los jugadores de esa plantilla que puso los cimientos para llegar a la élite del fútbol sala nacional.

Rodríguez recuerda esa temporada y el paso al frente para convertirse en preparador del Jaén Paraíso Interior FS. “César (Núñez) decidió no seguir y Nicolás Sabariego me ofreció ser el técnico. Fue una temporada muy bonita en la que llegamos a las eliminatorias de ascenso. Nos eliminó el Sala 5 Martorell y parecía que todo se venía abajo, pero seguimos con el mismo objetivo y al año siguiente se logró el ascenso a la máxima categoría”, rememora. Catorce años después se volvió a Primera y ahí empezó a forjarse la leyenda de un equipo, que partir de 2013 fue patrocinado por Jaén, paraíso interior, la marca turística y promocional de la Diputación Provincial. “Regresamos a la Primera División con un reto inicial de mantenernos y lo conseguimos, para al año siguiente dar un paso más ambicioso y el resultado fue espectacular con nuestra primera Copa de España en Ciudad Real y la clasificación para el play off por el título”, se emociona. Ahí empezó a forjarse la leyenda de la marea amarilla con una peregrinación a Ciudad Real de más de 4.000 aficionados para disputar la final ante el todopoderoso Barça. También sirvió como primer mensaje reivindicativo para contar con una nueva instalación que tomara el relevo de La Salobreja, que cuenta con un aforo de 1.200 espectadores. “Fue la demostración de que se necesitaba un pabellón nuevo y con más aforo. El club abanderó la petición y desde el año 2021 jugamos en el Olivo Arena. Contamos con una masa social fantástica con abonados de la capital y de todos los puntos de la provincia. El palacio de los deportes ha sido clave para crecer como club, con resultados deportivos brillantes y con más recursos propios a la hora de mejorar en todos los ámbitos. Es el camino a seguir y somos un ejemplo para mucha gente”, destaca.

Daniel Rodríguez admite que la temporada entra en una fase decisiva y apasionante. Se congratula de que el Jaén Paraíso Interior llegue a los dos últimos meses de competición con retos ambiciosos, ya que el pasado sábado se clasificó por octava vez para las eliminatorias por el título de Liga. Pero es que, además, es uno de los cuatro conjuntos que diputarán la fase final de la Copa del Rey, los días 18 y 19 de mayo en Sevilla.

La hoja de ruta está ya decidida y jugará la segunda semifinal con el Jimbee Cartagena, después del bochorno que se vivió en el sorteo con el error en el orden de los emparejamientos. El otro cruce lo protagonizarán el Real Betis Futsal y el Servigroup Peñíscola de Castellón. El entrenador elogia y valora la regularidad que exhibe su equipo en cada competición que disputa. “Completamos una buena Copa de España y todo el mundo vio lo que pasó en los últimos segundos en la semifinal con ElPozo de Murcia. En la Liga ya tenemos plaza fija para las eliminatorias por el título y ahora el objetivo que buscamos es acabar entre los cuatro primeros clasificados para tener el factor pista a favor. También estamos en la fase final de la Copa del Rey con el objetivo de tratar lo más lejos posible, pese a la dificultad de los tres rivales participantes”, argumenta. El entrenador del Jaén Paraíso Interior entiende que es complicado repetir los resultados de la pasada temporada “cuando ganamos la Copa de España y llegamos a la final de la Liga ante el Barça, pero creo que nuestra campaña es positiva al estar presentes en las fases final de todos los tornos”, apunta el técnico. Daniel Rodríguez, que en 2022 renovó por tres años más uno opcional, quiere estar centrado en los entrenamientos y los entrenamientos, pero es consciente de que los clubes se encuentran ya en un proceso de renovaciones y fichajes. Esa labor la realiza Nicolás Sabariego en el Jaén Paraíso Interior FS. El director deportivo negocia una serie de fichajes debido a que, de nuevo, se producirán bajas en la plantilla de jugadores que no entran en los planes y de otros se han decantado por otras propuestas económicas superiores, como es el caso de César Velasco. El ala cordobés militará durante tres años en ElPozo de Murcia, con el que cerró el acuerdo hace unas semanas. También está complicada la continuidad del argentino Pablo Taborda, un jugador clave en el esquema de Rodríguez por su calidad y capacidad de liderazgo, pero que cuenta con una importante oferta económica del fútbol sala italiano, aunque con este país le unen lazos familiares y de amistad. No obstante, el Jaén Paraíso Interior trata de renovarlo, al menos, un año más, máxime cuando Mauricio se centrará en labores de coordinación en la estructura del Jaén Paraíso Interior.

Es uno de los modelos en los que se ha fijado Daniel Rodríguez para fijarse y crecer como entrenador debido a sus métodos y a esa serie de innovaciones que introdujo en el fútbol sala a finales de los 90, como el cambiar los cuartetos en una sola vez, además de otras cuestiones. Miguel Rodrigo Conde-Salazar (Valencia, 15 de julio de 1970) llegó a Granada de niño y desde esta ciudad empezó una carrera en equipos españoles y banquillos de clubes y selecciones internacionales. Hace unos días clasificó a Tailandia para las semifinales de la Copa Asia y para el Mundial de Uzbequistán. Rodrigo entrenó a Rodríguez en la temporada 99/00, en la que el equipo se quedó a un gol de ascender en el, play off con el Valencia. Desde Bangkok, el técnico elogió su trabajo y se alegró por el premio de Jiennense del Año en el apartado de Deportes. “Como jugador era un entrenador en pista de la generación de los jóvenes, que formaba junto con Paco Gómez, Willy y Paco Ortega. Era muy inteligente y, además, transmitía a sus compañeros trabajo y furia en los partidos. Era un 10 y todo lo ejecutaba a la perfección”, destacó el preparador. Entre otros clubes, figuran en su historial Segovia, Padova y Luparense (Italia) y el Dinamo Moscú (Rusia). También dirigió a la selección de Japón, entre 2009 y 2016, con la que ganó dos Copas de Asia, y a la de Vietnam, de 2017 a 2019, y en una primera etapa a Tailandia. Rodrigo, igualmente, se refirió al trabajo de Daniel Rodríguez como entrenador. “Lo admiro mucho y ahí está su palmarés y los éxitos que ha conseguido con el Jaén Paraíso Interior FS. Posee una versión conservadora y otra más atacante, pero lo más importante es la capacidad de análisis de los rivales a la hora de encontrar sus puntos débiles. Es un preparador que da libertad a sus jugadores, que destaca por ser muy camaleónico y se adapta a sus plantillas”.

Forman un equipo perfecto que está avalado por los resultados deportivos y el crecimiento espectacular de la entidad en el ámbito institucional, con una masa social que supera los 5.800 abonados esta temporada y que la más importante europea en el fútbol sala. Nicolás Sabariego, entonces presidente del Jaén FS, que se denominaba Fuconsa, le ofreció el cargo de entrenador a finales de junio de 2011. El jerezano Carlos César Núñez, que logró la permanencia en Segunda División, rescindió el contrato debido a una tentadora oferta de Italia. Sabariego no dudó un instante y le ofreció el cargo a Dani Rodríguez, que con 33 años aún tenía intención de seguir como jugador. “El trabajo y los resultados avalan la apuesta de 2011. El entrenador es nuestra piedra angular desde que accedió al cargo y es una persona fundamental en el proyecto, aunque soy consciente de que algún día se marchará y afrontará otros retos”, apunta Sabariego, que ahora es director deportivo del Jaén Paraíso Interior. El responsable pone en valor los logros de la entidad en más de una década. “Tres Copas de España, algo que era impensable, tres subcampeonatos de la Copa del Rey, y el subcampeonato de la Liga de 2023, son gracias a la aportación de Dani, los jugadores, la junta directiva, su cuadro técnico, los patrocinadores y esa marea amarilla que cada vez es más grande”, se emociona. Nicolás Sabariego elogia la profesionalidad y el compromiso del entrenador, además de su metodología de trabajo. “Es un ejemplo para todos y una alegría que el Jaén Paraíso Interior FS cuente con un técnico de esta dimensión y prestigio”, destaca. El director deportivo trabaja en las altas y bajas de su plantilla, aunque mantiene silencio para no interferir en la competición. “Nos jugamos mucho, tanto en la Liga como en la Copa del Rey, y no quiero distracciones” en estas semanas, afirma Nicolás Sabariego.

Hacía maravillas con el balón, marcaba goles y le gustaba trabajar con la gente joven cuando no tenía partido con el Jaén FS, que en la década de los 90 se denominaba Oliva Secavi. Adolfo Boni Freire (Mairiporã, Brasil, 28 de octubre de 1963) dejó un legado deportivo y de amistad que aún es recordado por los aficionados amarillos, que estaban deseando que llegara el domingo por la mañana para presenciar los partidos en el Pabellón de La Salobreja. A sus 60 años, Boni trabaja como analista de importación y exportación. El exjugador y extécnico conoce a la perfección a Dani Rodríguez, porque fue su entrenador en infantil, cadete y juvenil en el Distrito 2, un equipo que, en la Federación Jiennense de Fútbol Sala presidida por Manolo Cruz, ganó títulos provinciales, regionales y nacionales. Boni elogió las cualidades del actual técnico del Jaén Paraíso Interior y destacó. “Me parece tan intenso de entrenador como era de jugador. Dani jugaba y hacía jugar a sus compañeros. Desde niño ya destacaba por su capacidad de liderazgo en la pista, que después lo ha trasladado en su faceta de entrenador con una trayectoria impresionantes”. El brasileño, que continúa teniendo relación con el técnico por medio del grupo de los veteranos del Jaén FS, dirigió a un equipo de promesas que después militaron en la primera plantilla, como Willy, Paco Gómez, Paco Ortega, Armando, Javi Carvajal, Pardillo y Lolo, además de Daniel Rodríguez. Adolfo Boni recordó con añoranza las vivencias en el Jaén FS, con las dos Copas de Europa ganadas (91 y 92) y los tres títulos. “Fueron momentos inolvidables con resultados brillantes, pero también es cierto que lo pasamos mal cuando había falta de cobros. Era otra época y ahora el club es uno de los más importantes y tiene asentadas las bases deportiva y económicas”. Su ilusión es la de regresar algún día a la capital jiennense.