José Vico Lizana, galardonado con el Premio Embajador de la Ardilla

El consejo regulador de la Denominación de Origen Protegida del Aceite de Oliva Virgen Extra Sierra de Segura concede el Premio Embajador de la Ardilla a José Vico Lizana, experto en asuntos relacionados con el aceite y el mundo del olivar.

09 abr 2014 / 22:00 H.

El galardón reconoce el trabajo y la dedicación de personas e instituciones que contribuyen a la proyección del aceite con denominación "Sierra de Segura", así como a potenciar su prestigio. Según la organización, gracias a esta labor se conoce, del mismo modo, la comarca. El reconocimiento ha recaído, en anteriores ediciones, en personas y empresas como el investigador Marino Uceda, el rector de la Universidad de Jaén, Manuel Parras; la emisora Radio Sierra y el periodista sileño Antonio Jiménez, entre otros. La distinción se entregará en la Fiesta del Remate, que se celebrará en el mes de junio.

Por otro lado, el secretario del órgano certificador, Francisco Mo- reno, califica la trayectoria de José Vico como "digna de admiración". Este sentido afirma: "Comenzó a trabajar en la comarca de la Sierra de Segura, en los años 80, en plantación y, desde entonces, no ha parado de innovar, de apostar por el aceite de la tierra. Para ello, ha invertido mucho tiempo y mucho trabajo en cosechar un producto de la máxima calidad". El responsable de la Denominación de Origen resalta, además, que el galardonado ha ayudado a que se conociera el oro líquido "no solo en la zona, sino mucho más allá de sus fronteras". Asimismo, recuerda que fue la primera persona en conseguir un premio nacional de calidad con aceite picual de la provincia de Jaén y también su trabajo como vocal del consejo regulador entre 2001 y 2014.

Por su parte, el premiado, José Vico, rememora sus comienzos en la Sierra de Segura y su labor con la institución y las empresas de la zona. "No se trata de una comarca que destaque por la cantidad de aceite producido, pero, ahora sí, por la calidad del mismo", asegura. Igualmente, manifiesta su satisfacción por el galardón. "Un premio -dice- siempre es una buena noticia y si, además, llega de tus compañeros, con los que llevas más de veinte años trabajando, este reconocimiento vale por dos". El Premio Embajador de la Ardilla se entregará junto a los aceites premiados por el panel de cata.