Vuelta a casa por su patrón

Un gran número de emigrantes regresan para disfrutar de las fiestas

25 jun 2018 / 08:33 H.

Estos días están llenos de gozo y alegría para los vecinos de Aldeahermosa, la pequeña pedanía de Montizón. Durante la Feria y Fiestas de San Juan Bautista la población se echa a la calle a disfrutar de las 16 vaquillas que se sueltan frente a la iglesia que comparte nombre con el patrón durante cuatro días y en una plaza improvisada a la que no le faltan detalles. El día grande fue la festividad de San Juan, en la que todos sus devotos honraron al santo con la festividad religiosa y su posterior procesión por las calles de la aldea.

El sol no pudo brillar más y, desde las 11:30 horas que comenzó la eucaristía, todos los vecinos buscaron refugio en el templo o en la sombra a sus puertas, pero el calor no pudo con las ganas de estos fieles que incluso acudieron desde cientos de kilómetros de distancia para compartir con sus familias, en el pueblo en el que nacieron, estos días de fiesta. En la iglesia no cogía nadie más, muchos de los vecinos tuvieron que apostarse en los laterales y la parte trasera del templo de pie para escuchar la misa en honor del patrón. Tras la bendición del párroco y la canción de San Juan, entonada a coro por todo el templo, una sonora ovación se alzó por encima de los vítores al patrón.

Mientras que el hermano mayor de la Cofradía de San Juan Bautista de Aldeahermosa, Cristóbal García, explicó en la iglesia el método de la procesión, todos los vecinos esperaron en la calle a que los anderos portaran por el pueblo la imagen del santo. Las altas temperaturas fueron una lucha constante, pero ningún devoto abandonó al patrón en su desfile procesional. Personas llegadas desde Cataluña o la Comunidad Valenciana explicaron que esta es una fecha señalada en sus calendarios y que no pueden faltar en su “vuelta a casa” para las fiestas en honor de San Juan.

Por la tarde, desde las 19:00 horas, jóvenes y mayores disfrutaron con la suelta de las vaquillas. Los mozos intentaron recortes frente a los animales bajo la atenta mirada de los más mayores de Aldeahermosa, que siempre disfrutan de los espectáculos taurinos en su pequeño, pero acogedor y agradecido pueblo.