Una tormenta deja numerosos daños a su paso por Mogón

Durante poco más de 15 minutos, los vecinos de la pedanía vivieron auténticos momentos de terror

09 ago 2018 / 08:50 H.

Varios árboles arrancados de raíz, carreteras inutilizadas, coches destrozados. Esa fue la estampa que vivió Mogón en la tarde de ayer. Tras los últimos avisos que informaban de que la ola de calor dejaría paso estos días a una serie de temporales y tormentas estivales, Mogón fue la primera pedanía jiennense en sufrir los efectos de uno de estos devastadores fenómenos meteorológicos. Sobre las 19:00 horas, y durante solo 15 minutos, los vecinos de esta pedanía de Villacarrillo vivieron momentos de terror debido a una tormenta, acompañada de unas fuertes rachas de viento que acabaron con prácticamente todo a su paso.

De esta forma, numerosos árboles que se encuentran por toda la pedanía fueron derribados por la fuerza de un temporal que también llegó a soltar granizo durante unos pocos minutos. La caída de los árboles más grandes ocasionó numerosos desperfectos en las casas y jardines, así como el derribo de un poste de electricidad que acabó con el suministro de algunos vecinos. Otro de los incidentes más destacados fue la caída de una enorme rama sobre un coche que se encontraba estacionado junto a la carretera que da acceso al pueblo de Iznatoraf.

Los chalets y viviendas que se encontraban más alejados del núcleo de población fueron los que se llevaron la peor parte, ya que la gran cantidad de vegetación que los rodea causó grandes daños debido al incesante viento, que algunos vecinos llegaron a confundir con un huracán por su fuerza devastadora.

cArretera cortada. Los efectos de esta tormenta estival afectaron no solo a los vecinos residentes en la zona, y es que la carretera que cruza la pedanía y une a esta con Villacarrillo estuvo cortada durante más de una hora hasta que los agentes desplazados al lugar de los hechos pudieron despejar la vía y permitir que se continuara con al circulación. La Policía Local se vio sobrepasada por los desperfectos causados en tan breve lapso de tiempo por un vendaval que dejó su huella a lo largo de toda la pedanía, teniendo que trabajar durante varias horas para dejar la situación controlada.