Una propuesta singular para disfrutar de los alojamientos rurales de El Condado (3)

El Condado es un auténtico tesoro de historia, cultura y belleza natural, con rincones que, en muchos casos, son desconocidos para los visitantes y para los propios jiennenses. Esta comarca situada al norte de la provincia, con una extensión aproximada de 1.300 kilómetros cuadrados, ofrece una mezcla única de paisajes: un olivar que se extiende hasta donde se pierde la vista; bosques mediterráneos llenos de encinas, alcornoques y madroños; y lomas pertenecientes a Sierra Morena y Despeñaperros. Algunos ejemplos de la gran variedad que ofrece este territorio serían la enorme costa interior que ofrece Vilches con los embalses de La Fernandina, Guadalén y Giribaile; o la cueva de la Lobera, en Castellar, un santuario rupestre de los siglos IV y III a.C. donde se rendía culto a los diferentes dioses. Sin lugar a dudas, El Condado es uno de esos lugares poco explorados por los forasteros pero que, cuando desvelan sus secretos, atrapan a quienes descubren su belleza, por lo que siempre necesitan más tiempo para pasear por la zona. Por suerte para el visitante, los municipios cuentan con un gran abanico de alojamientos rurales con el objetivo de que puedan vivir al máximo esta experiencia.

A continuación, les ofrecemos una propuesta única de alojamientos rurales con mucho encanto de El Condado:

- Pub Ricardo, en Navas de San Juan.

- Café-Bar La Virgen, en Chiclana de Segura.

- Restaurante Tapería Pidetotra, en Navas de San Juan.

- Finca El Vadillo, en Navas de San Juan.

- Hacienda La Marquesa, en Vilches.

- Restaurante Baesucci, en Vilches.

- Premium Gastro & Copas, en Santisteban del Puerto.

- Sabores del Condado Catering, en Santisteban del Puerto.

- Restaurante La Alacena, en Navas de San Juan.

- Finca El Vizconde, en Arquillos.

El Condado fue territorio fronterizo y encrucijada de caminos, un pasado que ahora se manifiesta en puentes romanos, castillos y torreones. Es el ejemplo de Navas de San Juan, en cuyas entrañas se esconde un tesoro de historia y devoción: la Ermita de la Virgen de la Estrella. Este santuario, levantado sobre una antigua fortaleza árabe del siglo XIII, guarda celosamente la torre del homenaje como testigo de su pasado. Su estructura de mampostería encalada y sillería vista revela una planta basilical con arcos de medio punto sobre pilares cuadrangulares, mientras que el camarín de la Virgen, situado en la torre del homenaje, exhibe una bóveda de media naranja sobre pechinas. Los cambios a lo largo de los años son evidentes desde el exterior, donde se observan vanos y saeteras cegados. En 1781, se erigió el campanario, seguido por la espadaña en el siglo pasado.

Entre los ríos Guadalimar y Montizón se sitúa el municipio de Santisteban del Puerto, un lugar donde abundan los espacios montañosos, pero también un espacio donde encontramos un rico patrimonio cultural. Desde el mirador de La Guarida se puede observar todo el pueblo, donde se alzan la Iglesia de San Esteban y la Iglesia de Santa María del Collado, siendo esta última la principal. Fue declarada Bien de Interés Cultural en el año 1978 y en su interior se combinan de manera armoniosa el arte plateresco, el renacentista y el gótico. Además, Santisteban del Puerto cuenta con un museo dedicado al escultor Jacinto Higueras, uno de los escultores contemporáneos más importantes del siglo XX.

Estos son solo algunos de los encantos que esta comarca tiene que ofrecer a quienes buscan descubrir la esencia del sur.