Los socios de “La Unión” no aceptan el plan de la rectora

La ruptura en el seno del consejo rector de la cooperativa La Unión y el distanciamiento respecto de quien fuera su presidente, José Consuegra Melgarejo, se escenificó nítidamente en la asamblea general extraordinaria celebrada en el polideportivo municipal Antonio Gutiérrez “El Viejo”. Todos los socios estaban sentados en una hilera de sillas y, detrás de un asiento vacío y al otro lado de la mesa, se instaló el expresidente de la cooperativa oleícola.

El consejo rector anunció que la sociedad presenta una situación financiera que imposibilita que los socios impositores de plazo fijo y titulares de cuenta corriente de su sección de crédito dispongan de sus fondos de forma inmediata. Además, se les facilitó un estado de cuentas en el que se les explicaba, de manera pormenorizada, la situación económica de la cooperativa. Como consecuencia, es necesario adoptar una serie de medidas para restablecer el equilibrio financiero de la cooperativa mediante líneas de financiación, lo que supondría un esfuerzo económico para los socios. Pero, a la vez, se indicó que se implantarían una gestión y una transparencia para garantizar la viabilidad de la sociedad.

La propuesta no se votó, porque —según pudo saber este periódico— los socios no tienen confianza en el consejo rector. Se les proponía que los depósitos y saldos de las cuentas corrientes se remunerarán al 0% de interés, proceder al pago de las liquidaciones de la última campaña, que devolvieran los intereses de la sección de crédito de los últimos cinco años y, además, se habló de establecer un calendario de pagos para los socios de la sección de crédito o la reducción de cinco céntimos por kilo de aceituna entregado por los agricultores durante las próximas siete cosechas. Aparte, se pedía que los cooperativistas se comprometiesen ante notario a entregar, durante un plazo mínimo de 5 años, la producción íntegra de sus cosechas de aceituna a fin de que estas sirvieran avales para negociar préstamos hipotecarios. Los socios no aceptaron ninguno de estos términos. El próximo 9 de noviembre se celebrará una asamblea en la que se elegirá una nueva junta rectora.

Consuegra quiso tomar la palabra, pero le fue denegada. Su intención era proponer una solución al problema financiero de la cooperativa, aunque insiste en que no son tantos millones como se quiere hacer ver. Así pues, proponía pedir un crédito a devolver en 15 o 20 años con el fin de acabar con los problemas de liquidez que presenta la sociedad.

La Unión cuenta con 2.576 socios que están afectados de una u otra manera, pues los miembros de la cooperativa pueden ser agricultores con o sin sección de crédito y personas con sección de crédito. En la asamblea estuvo presente Javier Vera Tovar, quien, como notario, levantó acta de todo lo que allí se dijo y se acordó.