Cita con el rock en Los Cerros

Más de cinco horas de música en directo gracias a la segunda edición de “Los Cerros Sound Festival”. A las siete de la tarde del sábado daba comienzo la cita musical. El cartel lo conformaban grupos como Loquillo, Obús, Mardita Passió y los Tsunamis.

Abrió el espectáculo la banda ubetense Los Tsunamis, un grupo que se caracteriza por su música instrumental, una mezcla de rock and roll de los años cincuenta y primeros de los sesenta, pasando por varios subgéneros como el wester, space surf o terror surf. Los componentes del conjunto manifestaron su alegría por estar presentes en el festival, pues para ellos supone volver a los escenarios ubetenses y además acompañados de tres grandes del rock, como son Loquillo, Obús y Mardita Passio.

Tras el grupo ubetense llegó el turno de Obús, banda legendaria del rock duro nacional, artífices de algunos de los himnos definitivos del rock patrio. Obús ha logrado defender su legado tras décadas de actividad intermitente en las que no han perdido un ápice de su incendiaria actitud sobre los escenarios. En Los Cerros, el grupo presentó su nuevo trabajo, que es toda una declaración de intenciones y lleva por título “Siente el rock and roll”.

Durante su actuación la banda interpretó algunos de sus temas tan clásicos, como: “Vamos Muy Bien”, “El Que Más” o “Va a estallar el obús”. Además de otros como “Lola”, “Siente el rock and roll” o “Eres mi estrella”.

Después de Obús subió al escenario instalado en el coso de San Nicasio la banda local Mardita Passió. El grupo era el único de los cuatro que participaron en la anterior edición de “Los Cerros Sound Festival”.

Mardita recordó de manera muy especial al grupo Supersubmarina, banda estrella de la cita musical del año pasado. Tuvo un guiño con ellos, y les desearon una pronta recuperación. Como homenaje, interpretaron LN Granada, una de las canciones que los catapultó a lo más alto del panorama “indie” nacional. Mardita presentó su nuevo de disco, que se llama “Sin miedo al horizonte” y vio la luz en julio gracias a unos mecenas que han hecho posible su publicación.

El broche de oro a una colosal noche de rock lo puso José María Sanz Beltrán, más conocido como “Loquillo”, quien saltó al escenario impecable, vestido de negro, con americana y pantalón de traje. El público coreó sus canciones y el cantante les hizo recordar otros tiempos pasados, con sus movimientos y saber estar sobre los escenarios.

Loquillo, a lo largo de dos horas, interpretó canciones de su último trabajo, “Viento del este”, mezclándolas con grandes éxitos como: “Feo, fuerte y forma”, “Ritmo del garaje”, “Quiero un camión” o “Cadillac solitario”. Un gran concierto ofrecido por el cantante catalán que dejó un muy buen sabor de boca.