El albergue temporero abre y no prevé cerrar hasta febrero

El objetivo municipal es que no haya nadie que tenga que dormir en la calle

03 dic 2016 / 11:16 H.

El albergue municipal de Torredonjimeno abre sus puertas para acoger a los temporeros que acudan al municipio en busca de trabajo durante la época de recolección de aceituna. Veinticinco hombres son los que ya ocupan la mayoría de las camas disponibles en el dormitorio, que tiene 33 plazas para varones y 3 para mujeres. “Es uno de los más grandes, por tanto, de la provincia”, según dejaron claro varios miembros del equipo de Gobierno.

“Todavía existe la desigualdad social, pero nosotros intentamos poner nuestro grano de arena y, en un municipio de 14.100 habitantes, intentar que la igualdad no se vea rota”, reflexionó el alcalde, Juan Ortega. “Aunque haya otras normas en España y la provincia, en Torredonjimeno lo tenemos muy claro. Son las indicaciones que se me han dado: que no se quede durante la noche nadie en la calle mientras haya plazas en el albergue”, explicó el director, y presidente de Cruz Roja local, Campiña Sur y Sierra Sur, Antonio Bueno, que, de esta forma, explicó la filosofía del centro. No obstante, el periodo máximo de estancia continúa establecido en 3 días, aunque se podrá ampliar por cuestiones humanitarias.

De que las condiciones para los temporeros sean las mejores durante su estancia se encargarán los cinco empleados del albergue. Además, las instalaciones mejoran con respecto al año pasado, con una caldera nueva en la primera planta, que se une a la mejora de otro calentador, acometida durante el anterior mandato, tal y como explicó la concejal de Asuntos Sociales y Mujer, Berta Granadino. La responsable municipal también dejó claro sus deseos de que toda la campaña transcurra sin incidentes graves, como ya ocurrió el año pasado, tal y como recordó. El actual equipo de Gobierno asegura que su intención es continuar con su apuesta por el mantenimiento del servicio, lo que, como aseguran, se demuestra con un aumento en un 5% del presupuesto del área de Asuntos Sociales y de Mujer.

En la campaña pasada, el albergue tosiriano cerró sus puertas el 26 de enero, con lo que fue el último de la provincia, tal y como apuntaron los responsables de la Administración local. Se atendió a casi un millar de personas, 759 de ellas que llegaron a estar albergadas, con una media de ocupación de 25 personas diarias y se repartieron unas 6.000 comidas. En esta ocasión, se prevé que el albergue pueda estar abierto hasta febrero, dado que las previsiones hablan de un tiempo de recolección de entre 80 y 90 días en algunos tajos, según el alcalde.