Una Semana Santa llena de devoción en Torredelcampo

La Sentencia centra todas las miradas en la jornada de Jueves Santo

18 abr 2019 / 09:39 H.

La imagen de Cristo Rey en su Entrada Triunfal en Jerusalén, “La Borriquita”, obra del joven artista torrecampeño Antonio Jesús Parras, inauguró el pasado Domingo de Ramos la Semana Santa de Torredelcampo, a quien siguió, por la tarde, la Pura y Limpia Concepción del Dulce Nombre de María, Cofradía de Nazarenos de Nuestro Señor de la Caridad en su Prendimiento y María Santísima de la Encarnación, que hacía su estación de penitencia por tercer año consecutivo. El Miércoles Santo por la noche, se celebró un solemne vía crucis presidido por la imagen del Cristo de la Misericordia. Las diferentes estaciones se rezaron este año por las calles del casco antiguo de la localidad.

Tras la celebración de los oficios de Jueves Santo, esta tarde realizará su estación de penitencia la cofradía del Santísimo Cristo de la Santa Vera-Cruz, Jesús Sentenciado y María Santísima de la Piedad, una de las hermandades más antiguas de Torredelcampo, fundada en el siglo XVII.

El Viernes Santo comenzará muy temprano, con la estación de penitencia de la cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de la Aurora, por cuyas imágenes los torrecampeños sienten una especial devoción.

La tarde-noche del Viernes Santo se vestirá de luto para acompañar a la imagen del Cristo Yacente que procesiona la cofradía del Santo Sepulcro de Nuestro Señor Jesucristo y María Santísima de la Esperanza, otra de las hermandades más antiguas del municipio.

En la medianoche del Viernes al Sábado Santo, la Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores “La Soledad” recorrerá las calles en silencio, antes que el Domingo de Resurrección procesione la cofradía de la Anunciación de Jesús Resucitado, Santa María Magdalena y María Santísima de la Paz.

La Soledad, una imagen con historia

La Virgen, que aparece en el cartel de Semana Santa de este año, una obra de la pintora torrecampeña Belén Jiménez, fue antiguamente la única dolorosa del municipio, motivo por el que muchos vecinos la recuerdan acompañando al resto de cofradías en sus respectivos desfiles procesionales. La imagen, que procesiona la madrugada del viernes al sábado, recorre las calles en completo silencio.