Últimos pasos para conseguir el ansiado olivar de regadío

La Confederación fija un plazo de tres meses para la presentación del proyecto

24 ene 2019 / 11:46 H.

La puesta en marcha de olivar de riego en Torredelcampo está cada vez más cerca, después del visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir a la comunidad de regantes “Santa Ana”. Comienzan así ya a darse los pasos definitivos para que, en un año aproximadamente, se puedan regar unas 1.030 hectáreas.

La CHG ha fijado un plazo de tres meses para que se presente el proyecto técnico definitivo y los títulos de propiedad, que permitan el inicio de las obras necesarias para la implantación del riego.

En el Ayuntamiento de Torredelcampo se mantuvo días pasados una reunión a la que asistió una representación de la comunidad de regantes, los técnicos encargados del proyecto y el primer teniente de alcalde y concejal de Agricultura, José Quesada, un encuentro que sirvió para establecer las principales líneas de acción durante los próximos meses, para que las infraestructuras necesarias del riego puedan estar listas cuanto antes. La concesión prevé el uso de 1.260.000 metros cúbicos de agua, destinada a una superficie regable de 1.030 hectáreas, con más de 100.000 olivos.

José Quesada valora estos últimos pasos que se dan en este proyecto, que comenzó a gestionarse hace 18 años y que, definitivamente, pronto será una realidad. “Tenemos que establecer un calendario que nos permita salvar con rapidez todos trámites burocráticos y que las obras de las infraestructuras necesarias puedan comenzarse cuanto antes”, matizó el primer teniente de alcalde, quien animó a los agricultores de la comunidad de regantes a seguir trabajando sin demora para la finalización definitiva de los trámites y de las obras necesarias.

obras. Por su parte, el ingeniero Carlos Pinilla subrayó que el proyecto se encuentra “muy avanzado”, aunque ahora se tendrán que perfilar algunos detalles como la ubicación de algunas de las instalaciones y la revisión de datos del proyecto inicial para ajustarlos al definitivo. Así, los técnicos estiman que las obras podrían acometerse en un plazo de entre nueve y doces meses y que la inversión rondaría los tres millones y medio. “La experiencia nos indica que cuando un olivar pasa de secano a regadío en dos o tres años los agricultores suelen amortizar la inversión, y a veces incluso en la primera cosecha”, aseguró el ingeniero Carlos Pinilla. En definitiva, la puesta en marcha del olivar de riego significará en Torredelcampo un paso más en la modernización de sus infraestructuras agrarias, por las que se apuesta desde hace casi dos décadas. Precisamente, este es uno de los municipios de Andalucía con mayor número de kilómetros de caminos rurales asfaltados, lo que ha significado una considerable mejora para la movilidad en el campo, sobre todo, durante la campaña de recolección de la aceituna.