Rabia e incomprensión por el hallazgo de otro lince muerto por disparo

El animal se localizó en Vilches con 15 proyectiles

12 oct 2017 / 10:08 H.

Entre la sorpresa, la rabia y la incomprensión. Así recibieron los vecinos de Vilches, en palabras de su alcalde, Bartolomé Guijo, la noticia del hallazgo de un cádaver de lince muerto por disparos. “No llegamos a entender cómo, en pleno siglo XXI, alguien llega a realizar un acto así. Estamos muy sorprendidos y decepcionados de que una persona, si se le puede llamar así, sea capaz de hacer algo así. No tiene absolutamente ningún tipo de explicación. Solo es barbarie”, dice. Más si se tiene en cuenta que hace menos de un mes, a mediados de septiembre, se localizó otro lince muerto por disparos en la provincia, dentro del término de Villanueva de la Reina. Para encontrar otros casos de linces muertos por disparos, hay que remontarse a 2006 y 2011 en Huelva y Sevilla.

Fue en la madrugada del pasado lunes, 9 de octubre, cuando técnicos de la Junta de Andalucía, adscritos al Proyecto Iberlince, recibieron el aviso de la presencia de un cadáver de lince ibérico en la A-301, en el término municipal de Vilches, tal y como detalló Iberlince. Se trataba de un cachorro macho sin identificar nacido este mismo año, procedente de la población silvestre de Sierra Morena, del núcleo de Guarrizas. El cadáver fue trasladado al Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de la Junta de Andalucía, donde se le practicó la necropsia. Los resultados determinan que la causa de la muerte se debió a traumatismo por disparo frontal y aplastamiento craneal. En el análisis radiológico se apreciaron al menos 15 proyectiles plomados, la mayoría alojados en la cabeza.

“Se trata de la zona de la A-301, la carretera entre Vilches y La Carolina”, explica Guijo. Allí, como detalla, existe una concentración de ejemplares y, en alguna ocasión, se ha producido algún atropello. Sí es la primera vez, reconoce, que la muerte sea “intencionada”. Recuerda que, tal y como anunció Fomento en verano, se invertirán 400.000 euros para instalar vallado en diez kilómetros de vía esta vía que eviten que los animales crucen la carretera. “Se hace un enorme esfuerzo desde las administraciones por recuperar la especie y, a pesar de lo difícil que es, se está consiguiendo y ahora te encuentras situaciones como esta. Es incomprensible”, reflexiona. Lo que sí hace es un llamamiento para pedir la colaboración ciudadana para que, cualquiera que pueda conocer algún detalle que ayude a la investigación, se ponga en contacto con las autoridades.

Colaboración de la federación de caza para “identificar al delincuente”

Minutos antes de que se conociera la noticia de este segundo lince muerto por disparos en la provincia, la Federación Andaluza de Caza se había posicionado con un llamamiento a los cazadores para que “colaboren activamente” con el Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil con el objetivo de “identificar al delincuente” que provocó la muerte por disparos de un lince, cuyos restos fueron hallados el 13 de septiembre en Villanueva de la Reina. El organismo apela también a la colaboración de los guardas de coto de caza de la zona, a los que considera “fundamentales” por ser nexo entre cotos y cazadores de la zona, de modo que manejan información que puede ser muy útil en la investigación que realiza la Guardia Civil.

El presidente de la FAC, José María Mancheño, indicó que este caso debe representar “un antes y un después” en la colaboración entre cazadores y Guardia Civil para “acabar con esta lacra””.

“Este suceso no puede servir para criminalizar a un colectivo que, una vez más, va a ser ejemplar, colaborando para identificar al o los delincuentes que han cometido este grave atentado contra un patrimonio natural, destacó. El delegado provincial, Pedro López Martínez, repudió este acto y animó a los cazadores del colectivo a colaborar en la investigación para identificar al “insensato” que ha cometido este delito.

diez muertos

atropellos. Son la principal causa de muerte no natural del lince, un verdadero varapalo para los esfuerzos de protección de esta especie. El último se produjo el primer fin de semana de octubre, aunque en esta ocasión, en vez de un vehículo, fue un tren, a su paso por el término municipal de Vilches, el que arrolló a un cachorro nacido durante este mismo año. Este fue el décimo atropello registrado en las carreteras andaluzas en lo que va de año. El caso anterior se dio a principios de septiembre en Vilches y, en el caso de la provincia, también se registraron dos fallecimientos durante el pasado julio: se encontró un ejemplar sin vida en la Autovía A-4, en el tramo entre Andújar y Bailén, y otro sin radiomarcar en el de Santa Elena. Otro lince atropellado fue localizado a principios de abril en la carretera A301, en la también jiennense comarca de Guarrizas, y a mediados del mismo mes apareció un ejemplar en el punto kilométrico 302 de la carretera A-4, en un tramo localizado entre Andújar y Bailén.