Un policía detenido en una redada por droga en Beas

Al cierre de esta edición había tres detenidos confirmados por la Guardia Civil como presuntos autores de delitos contra la salud pública. Son el citado agente, J. M. M. S. , un vecino de Arroyo del Ojanco, F. M. S., y otro de Beas de Segura, B. G. G., según ha podido saber este diario. El agente fue detenido en las propias instalaciones de la Policía Local de Beas, donde prestaba servicio. Después lo trasladaron al cuartel de Villacarrilo. Los otros dos  arrestados, al cierre de esta edición, aguardaban, en las dependencias del cuartel de la Guardia Civil de Beas, a la espera de pasar a disposición judicial.
caso. Los agentes se desplazaron a Vista Alegre, el barrio más alto del municipio, por la mañana. El revuelo en la zona era evidente. Hubo, además, registros en una casa de campo del citado agente, en el término municipal de Beas, así como en los domicilios particulares del resto de detenidos. Según pudo saber Diario JAÉN, uno de los objetivos de los Cuerpos de Seguridad era un vecino que tiene una propiedad en la zona. El ciudadano en cuestión es uno de los supuestos implicados en la operación por presunto tráfico de drogas. Se trata de una persona muy conocida en el municipio. Lugareños recuerdan que, en una ocasión, se vistió como un agente de la Guardia Civil para parar a coches que pasaban a su paso. “Aquello fue una broma. La verdad es que este hombre nunca había dado problemas importantes”, señala un residente que prefiere mantenerse en el anonimato.
Por otro lado, el policía detenido, si bien trabaja en Beas de Segura, tiene su domicilio en Arroyo del Ojanco, municipio donde ayer también hubo movimiento de agentes en el contexto de la misma operación que comenzó por la mañana en Beas de Segura. Ocurre que otro de los presuntos implicados es un hermano —residente en Arroyo del Ojanco— del policía detenido.
El policía detenido, acusado de un delito contra la salud pública, ejercía su actividad en  Beas de Seguras desde hace más de una década. Concretamente, desde que se produjo, en 2001, la segregación de Arroyo del Ojanco, el municipio en el que trabajaba hasta entonces.
 Sebastián Molina, máximo responsable municipal de Beas de Segura, aseguró, en declaraciones a este periódico, que la detención del policía del Ayuntamiento supuso “una sorpresa”. “Él hacía aquí su vida normal. No es algo que esperábamos, porque nunca antes habíamos tenido un problema, ni con él, ni con ningún policía del Ayuntamiento”, expresó el alcalde. Molina, que se enteró de la detención por la mañana, confirmó que había otras dos personas involucradas en la operación de tráfico de drogas, una de ellas, el hermano del policía local de Beas de Segura.
Manuela Carrasco, alcaldesa de Arroyo del Ojanco, declinó pronunciarse sobre el asunto.