se “olvidan” de los psicólogos

Gran intranquilidad para arrancar el curso. La Asociación de Discapacitados de Mengíbar y Comarca Abriendo Camino está en pie de guerra contra la convocatoria de ayudas para el alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo. Y lo está por el sencillo motivo de que si el Ministerio de Educación no la rectifica, el servicio de atención psicológica que recibe más de treinta niños corre el peligro de desaparecer. El problema reside en la letra pequeña, aseguran.

Los nuevos requisitos de la convocatoria indican que las becas de reeducación pedagógica solo la puede firmar un maestro, y no los psicólogos, que eran, hasta ahora, los que las rubricaban todos los cursos en colectivos como “Abriendo Camino”. “Llevamos muchos años para conseguir que el tratamiento que reciben fuera del colegio sea especializado, evitando así el intrusismo y la mala praxis. Y ahora de repente, sin avisar, exigen desde la Administración que nuestra plantilla esté llena de maestros de cualquier especialidad”, manifiesta Sebastián Zamora, presidente de la asociación, que mantiene un gabinete con tres psicólogos. “Su trabajo es esencial para nuestros niños”, apunta Zamora, al tiempo que aclara que su lucha no busca menospreciar a los maestros, “que hacen una labor imprescindible en los centros escolares, esforzándose diariamente para conseguir que los niños con discapacidad se sientan integrados y mejoren su nivel académico”.

“Pero también debemos remarcar la importancia de los psicólogos en gabinetes y asociaciones”, añade. Para reclamar la atención del Ministerio dirigido por Íñigo Méndez de Vigo, una de las psicólogas de “Abriendo Camino”, Ana Belén Cuevas, lanza una campaña de recogidas de firmas a través de la plataforma digital Change.org, que va camino de las mil firmas. “Estamos muy orgullosos del gran respaldo que estamos teniendo en tan poco tiempo”, indica Cuevas. Esta movilización se suma a la lucha emprendida por los colegios de psicólogos, que acaban de emitir una circular en la que se recoge la intención de Educación de aceptar las becas rubricadas por psicólogos “que tuvieran experiencia” en cursos anteriores. Sin embargo, se quedarían en la picota aquellos alumnos que teniendo problemas de aprendizaje no poseen el certificado de discapacidad (como un trastorno de atención). “Antes se daba esas becas porque los colegios no cubrían ese área”, indica.