Homenaje a un mengibareño ilustre en la capital vecina

Fue un mengibareño con una historia personal ejemplar y, precisamente, esta motivó que escribiese una página memorable de la historia de la ciudad de la Alhambra. Antonio Camacho García se convirtió, en 1979, en el primer alcalde de la democracia de Granada, en un momento tan difícil (reconoció que, a su llegada, en el Ayuntamiento no había ni siquiera dinero para folios, y hasta que puso “dinero de mi bolsillo para que se compraran bayetas para limpiar”) como apasionante, políticamente hablando.

Falleció el pasado 25 de diciembre a los 91 años, y la agrupación local del PSOE homenajeó, en el acto de conmemoración del Día de Andalucía, a este hombre “honrado” que fue directivo de la Caja de Ahorros de Granada y, que aunque residió desde 1949 en la capital de la provincia vecina, siempre mantuvo un vínculo continuo con su pueblo natal. Valentín Pinar, presentador del acto y miembro de la ejecutiva de los socialistas mengibareños, destacó el esfuerzo que le costó a Camacho García compaginar los estudios con el trabajo desde los nueve años, ya que a esa edad había perdido a su padre y a su hermano mayor. Con mucho esfuerzo y tesón, se labró un gran futuro hasta el punto de ser el primer regidor democrático en el consistorio granadino.

Joaquín, uno de los cuatro hijos de Camacho García, que estuvieron presentes en el acto, destacó de su padre el legado que les había dejado: “El valor del esfuerzo, trabajo y honradez”. Narró numerosas anécdotas y contó los entresijos del porqué de su precipitada dimisión, producida solo medio año después de coger el bastón de mando, mientras el salón lleno de la Casa del Pueblo escuchó con gran interés y emoción.

Un sentido y largo aplauso cerró un homenaje a “un socialista ejemplar” que hasta los últimos días de su vida estuvo cuidando de un huerto y asesorando a emprendedores. Durante el acto del 28-F del PSOE de Mengíbar, también se entregaron diplomas y otros reconocimientos a socialistas de la agrupación local.