Regresa a casa después de 1.400 años

Es una marteña que regresa al lugar que la vio nacer después de catorce siglos. No es ninguna persona. Se trata de una moneda, más concretamente un “triente” de oro de la época del rey visigodo Suinthila (621-631 d.C.) que fue acuñada en la ceca de Tucci hace 1.400 años. Su peso es de 1,42 gramos y ha sido adquirida recientemente en subasta cerrada por un vecino de Martos y depositada en la colección arqueológica del Padre Alejandro Recio Veganzones.

Mide poco más de un centímetro de diámetro. Su nuevo y anónimo propietario compartió este pedazo de la historia marteña con sus convecinos. A falta de un Museo Arqueológico en la ciudad, optó por dejarla en depósito con el resto de los fondos de la colección arqueológica del Padre Alejandro Recio, que, actualmente, gestiona la Fundación Cultura y Misión Francisco de Asís, al igual que el centro educativo que le sirve de sede en la Ciudad de la Peña.

Con esta adquisición, tal y como comenta Francisco Ocaña, director de la colección arqueológica, se ha logrado que una parte de la historia de Martos pueda ser disfrutada por todos los ciudadanos. Su adquisición no fue una tarea sencilla. “Su compra ha supuesto muchos años de intentos infructuosos para conseguirla participando en las subastas cerradas que como mucho se organizan un par de veces al año”, aseveró. “Al final, los esfuerzos del comprador se han visto recompensados y con la cesión en depósito de la moneda hemos puesto un grano de arena más para cumplir uno de los sueños del padre Recio encaminados a sensibilizar a los vecinos de Martos de la riqueza patrimonial de su ciudad”, concluyó Ocaña.

La ceca —lugar donde se emite moneda— de Tucci, la antigua Martos, estuvo operativa durante más de un siglo, entre los años 610 y 711 y siete reyes visigodos acuñaron sus monedas. Los visigodos adoptaron un sistema monometalista basado en el oro y ajustado al patrón de la libra romana. La moneda nacional fue el tremisis o triente de oro, como la que ahora nos ocupa y que era el equivalente a la moneda romana o bizantina del mismo nombre. Se contabilizaron casi cien talleres de fabricación de monedas de la época visigoda repartidos por España, de las que dos estarían ubicadas en la Ciudad de la Peña y Mentesa (La Guardia).