La ocupación del albergue baja hasta menos del 20%

El Albergue Municipal de Martos abrió sus puertas el pasado jueves 3 de enero para ofrecer sus servicios a los temporeros que acudieran a la ciudad durante la campaña de recolección de la aceituna, una vez celebrada la comisión local de Inmigración con la presencia del concejal de Bienestar Social del Ayuntamiento, Francisco Miranda; un asesor técnico de políticas migratorias de la Junta de Andalucía; representantes de la Policía Local y la Guardia Civil, y de colectivos como Cáritas, Cruz Roja, el Servicio Andaluz de Empleo y el centro de salud. Durante los primeros días de actividad, de las 36 plazas de las que gozan las instalaciones se encontraban en uso 24, es decir, que el albergue presentaba una ocupación del 67 por cierto; sin embargo, esa cifra mermó en esos 30 días hasta el punto de que, actualmente, el albergue está ocupado en un índice que se sitúa por debajo del 20 por ciento.

Las instalaciones marteñas se mantuvieron abiertas, la pasada campaña 2017-2018, durante 35 días, desde el 1 de diciembre de 2017 hasta el 5 de enero de 2018, un tiempo en el que, según los datos aportados desde el Ayuntamiento en marzo del año pasado, se atendió a 220 personas.

Si se tiene en cuenta, aparte del dato de descenso de ocupación, que en la presente campaña ya se ha superado el tiempo de apertura con respecto a la anterior, cabría pensar que las instalaciones cerrarán sus puertas en los próximos días, pero la realidad es que el Albergue Municipal aún presta sus servicios.

A ello hay que añadir el hecho de que el desarrollo de la campaña de aceituna aún se encuentra casi al 50 por ciento en el municipio y de que, según representantes de almazaras marteñas, esta pueda alargarse todavía más de un mes, a pesar de las escasas interrupciones que por motivos meteorológicos se presentan durante estos meses.

El Ayuntamiento, gracias a una subvención de la Dirección General de Políticas Migratorias de la Junta de Andalucía, invirtió casi 30.000 euros, en 2018, para mejorar las instalaciones del albergue y poder ofrecer unos servicios más eficaces a los usuarios que las utilizaran.

Por ejemplo, aquellas personas que han necesitado hacer uso de los servicios de aseo y ducha han podido hacerlo sin tener que ocupar plaza en el centro, merced a la remodelación. Además se ha contado con un puesto informativo en la Estación Municipal de Autobuses y, como novedad, Cruz Roja ofrece asesoramiento jurídico todos los jueves, unido a su servicio de ropero. Por su parte, la delegación local de Cáritas también colabora con sus cenas calientes para temporeros desde su sede marteña de la calle Franquera, las cuales se unen a las que también se ofrecen desde el propio albergue.