Fin de curso divertido en el “San Amador”

Taller de colchonetas, guiñol, fiestas de la espuma y del agua, payasos, taller de camisetas, una yincana y un taller de interculturalidad son algunas de las actividades preparadas por el cuerpo de profesores del colegio San Amador. De esta forma, los doscientos cuarenta alumnos del centro despiden el curso de una manera divertida. Según la directora, Antonia María Vázquez Quesada, la experiencia se remonta a cuatro años atrás, cuando el claustro de profesores decidió que los alumnos disfrutaran al máximo del final del curso. “Habitualmente, en otros centros, el final del curso está pensado para el disfrute de las familias. Nosotros nos planteamos una serie de actividades pensadas exclusivamente para el disfrute los chavales”, deja claro. “Se trata, en definitiva, de que los escolares lo pasen bien durante estos tres días, en los que se cortan las clases ordinarias, que sustituimos por tres talleres diarios, dos antes del recreo y uno después”. “No es que sea una forma mejor o peor de celebrarlo, es una forma diferente y en la que se implica toda la comunidad educativa”, dijo la responsable del centro.

Así, por ejemplo, la Asociación de Madres y Padres sufragó unas actividades en las que los alumnos disfrutaron de un castillo hinchable y un cañón de espuma. La directora también destacó el taller de interculturalidad y en el que algunas madres marroquíes se encargaron de talleres de tatuaje de henna y ofrecieron para su degustación tes y repostería típica marroquí. En este sentido, se apuntó que, entre el alumnado del colegio, hay un 55% de población inmigrante. También hay un curso de serigrafía de camisetas, en el que, con la ayuda de los profesores y algunos padres voluntarios, los alumnos decoran sus propias prendas. “Se trata de que vayan rotando por los talleres, en los que únicamente se han reservado los payasos para los más pequeños”, aclaró.