Sentimientos a flor de piel con el cantautor Antonio José

El joven cantautor Antonio José enamoró al público de Mancha Real durante su esperado concierto en las fiestas en honor a la Virgen del Rosario. Algunas fans llevaban un día esperándolo.

Antes del concierto el cordobés comentó su paso por el programa de La Voz, que lo catapultó a la fama pero que mientras estaba dentro no tenía asumido lo que iba a pasar, ni que iba a ganar. Señaló que ganarlo supuso “un cambio en la vida radical” pero siempre quiso “ser y seguir siendo el mismo, con mi familia para todos lados y eso es lo más importante para mí”. Para Antonio José ser cantante es un sueño hecho realidad y un objetivo por el que luchó durante toda su vida.

El cantante confesó que siempre “se tiene miedo”, pero, más bien, siente respeto. Para él, la incertidumbre retrae de muchas aciones y puede hacer que “uno se pierdas muchas cosas de las que luego se arrepiente no haber hecho”. Antonio José afirma que “hay que tener respeto a ciertas situaciones, pero no miedo. En mi diccionario no se encuentra esa palabra”. El artista se considera una persona a la que le gusta ir “con respeto hacia la vida, a la gente y a lo que enfrento y el miedo acobarda, empequeñece. Quizás esa actitud es una señal de educación hacia el trabajo que se hace y al el público al que dirigirse”.

Antes de subir el escenario Antonio José hizo su ritual que realiza previo a cada concierto y consiste en rezar a sus “estampitas” que les tiene mucha devoción, pidiéndole a Dios que le ayude a que todo salga correctamente.

Una vez pisó las tablas, el cordobés supo enamorar a sus fans que le acompañaron cantando cada una de sus canciones. El artista hizo vivir una noche inolvidable a las cerca de dos mil personas que hasta el pabellón de conciertos acudieron. Móviles en modo de pequeñas linternas crearon una atmósfera llena de emoción y sentimiento. Su simpatía, su dulzura y su arte supieron encandilar al público que no dejó de bailar y cantar cada uno de sus temas. Muchas seguidoras, al finalizar el concierto, salieron con los sentidos a flor de piel.

CURIOSIDADES. Tanta expectación generó este concierto que un numeroso grupo de seguidores, todos muy jóvenes venidos desde Jaén, Córdoba y Málaga hicieron cola en la puerta un día antes de la cita musical. Entre ellos había una niña pequeña de unos ocho años que no quería moverse del lugar por si le quitaban el sitio. Para que no pasaran la noche a la intemperie, la alcaldesa María del Mar Dávila avisó a sus trabajadores para que habilitaran una zona dentro del pabellón de conciertos donde poder trasnochar.