La tosiriana que desapareció el sábado, hallada viva en un olivar

Montserrat Cámara está hospitalizada en Jaén a la espera de una serie de pruebas

29 ago 2016 / 12:30 H.

Desenlace positivo. Montserrat Cámara Ortega, la vecina que se encontraba en paradero desconocido desde primera hora del sábado fue localizada ayer en aparente buen estado —solo con lesiones leves—, junto al camino conocido como Mataherreros. En torno a las ocho y media de la mañana Francisco Cortecero, un empleado municipal que posee una huerta en la zona, escuchó la llamada de auxilio de una mujer y, al personarse descubrió que se trataba de la desaparecida.

Al poco tiempo acudieron personal sanitario en una ambulancia, la Guardia Civil y la Policía Local. Cámara se encontraba en suelo —sentada o por una caída— en una especie de poza creada para aprovechar en el olivar el agua de lluvia. De acuerdo con las fuentes, la mujer presentaba lesiones aparentes, aunque se hallaba algo desorientada y deshidratada. Fue hospitalizada en Jaén, donde se encontraba al cierre de esta edición a la espera de que se le practicaran algunas pruebas.

La ausencia de Montserrat Cámara generó angustia entre los vecinos de Torredonjimeno y otros municipios de la comarca. El Instituto Armado se ha hecho cargo de la investigación del suceso, en el que existen varias incógnitas, como, por ejemplo, el trayecto exacto seguido y las causas de la ausencia. La tosiriana, de cincuenta y dos años, casada y con dos hijos, fue echada en falta el sábado hacia las seis de la mañana. La familia presentó la correspondiente denuncia esa misma tarde en el puesto de la Benemérita, en Martos. La residente en Torredonjimeno había salido de su domicilio, situado en la calle Goya, ubicada en la parte oriental del casco urbano —cerca del Paseo, la Estación de Autobuses y el estadio— para acudir al domicilio de la mujer mayor a la que cuidaba. Sin embargo no llegó a su destino, lo que hizo que, desde el principio, se encendieran las alarmas. A pesar de que en las primeras horas aún no había denuncia, la Policía Local se implicó en la búsqueda aunque, en principio, no hubo rastreos fuera de la ciudad. La sensación general era de sorpresa por la situación. A través de las redes sociales, los tosirianos se movili- zaron para colaborar. El punto en el que apareció la mujer se encuentra a alrededor de un kilómetro y medio del casco urbano, relativamente cerca del cementerio, y justo en el otro extremo de su vivienda. Las elevadas temperaturas registradas el sábado debilataron a la desaparecida que conocía el entorno del camino, que es un lugar muy frecuentado por la población local y por los agricultores de la zona.

El alcalde de Torredonjimeno, Juan Ortega —quien esta muy sensibilizado con estas situaciones, pues su hijo estuvo días en paradero desconocido hace unas semanas— se muestra aliviado con el final feliz para la historia. Igual que buena parte de los tosirianos se sintió muy concernido con la inesperada desaparición. A través de las redes sociales los habitantes de Torredonjimeno expresaron su alegría por el hallazgo de la mujer, muy conocida en el municipio tosiriano.