y el Alto Guadalquivir, más protegidos

La decisión del Consejo de Gobierno afecta a los términos de Jódar, Cazorla, Peal de Becerro, Torreperogil y Baeza

09 nov 2016 / 10:34 H.

El último Consejo de Gobierno de la Junta aprueba la declaración de siete nuevas Zonas Especiales de Conservación (ZEC) entre las que están los parajes naturales del Alto Guadalquivir, situado entre Cazorla, Jódar, Peal del Becerro y Torreperogil, y la Laguna Grande, en Baeza. Estas área se encuentran en el valle del Río Grande, en la parte central de la provincia jiennense, y se configuran como áreas de refugio para la biodiversidad. Se trata de un entorno de campiña, con presencia de extensas superficies cultivadas. El primero de estos parajes está constituido por tres embalses, Puente de la Cerrada, Doña Aldonza y Pedro Marín y el cauce que los une. Mientras que la laguna baezana está ya incluida en la lista de humedales de importancia internacional del Convenio Ramsar.

Junto a estas zonas, se protegen los parajes naturales de Karst en Yesos de Sorbas, Sierra Alhamilla y Desierto de Tabernas, en la provincia de Almería y Sierra Pelada y Rivera del Aserrador, y Peñas de Aroche, en Huelva. El reconocimiento de un espacio natural como ZEC conlleva su inclusión en la Red Natura 2000, donde se integran los hábitats que se consideran de mayor valor ecológico a escala continental, otorgando un plus de reconocimiento a la gestión pública de los mismos. Andalucía tiene un peso muy destacado en esta red, ya que cuenta con una de las mayores extensiones de territorio protegido de la Unión Europea y la mayor de España: casi 2,7 millones de hectáreas, el 30% de la superficie de la comunidad autónoma. Junto con la declaración de las siete ZEC, el Consejo de Gobierno de la Administración andaluza aprobó también los planes de ordenación de los recursos naturales de estos espacios. El objetivo es establecer las normas para compatibilizar los valores ecológicos con los usos y aprovechamientos, además de incorporar las exigencias específicas derivadas de la inclusión en la Red Natura 2000. De vigencia indefinida, y con evaluación cada seis años, los planes disponen medidas para preservar la flora y la fauna, garantizar la protección del paisaje y fijar las prioridades de conservación de los hábitats y especies de interés comunitario A las siete ZEC declaradas ayer, se sumarán, en los próximos meses, otras 40, con 316.900 hectáreas, de acuerdo con las previsiones de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio.