Adjudicación de los huertos sociales de titularidad pública

La entrega de resoluciones sobre las parcelas de los huertos sociales se celebró en el salón de plenos. Los beneficiarios —que cultivarán la tierra para autoconsumo— recibieron la documentación de manos de la alcaldesa, Yolanda Reche. Después del trámite, los adjudicatarios pueden empezar a trabajar las huertas. La regidora municipal socialista explicó: “Es una forma de facilitar a las familias que tienen menos recursos el acceso a alimentos frescos y saludables, a la vez que incentivamos la recuperación de la cultura de la huerta, que tiene tradición en nuestro municipio y que queremos recuperar”.

El Ayuntamiento habilitó veintitrés cuadrículas para su uso como huertos sociales. Sin embargo, el número de solicitudes resultó inferior a la oferta, por lo que se cubrieron todas las peticiones. Reche anunció que, en próximas fechas, habrá una nueva convocatoria para quienes reúnan los requisitos y quieran optar a alguna de las once parcelas que quedaron vacantes junto al Vivero Municipal. Los aspirantes deben estar empadronados en La Carolina, tener capacidad física y psíquica —que se acreditará con un certificado médico— para realizar las tareas agrícolas y presentar una declaración jurada sobre los ingresos mensuales de la unidad familiar, aspectos que habrá que acreditar y se tendrán en cuenta a la hora de baremar las peticiones. “Pondremos a disposición de la ciudadanía once nuevas parcelas destinadas para el autoconsumo, en las que podrán cultivar vegetales frescos que ayuden al mantenimiento de la unidad familiar”, dijo. El Ayuntamiento empleará para los nuevos huertos sociales parte del Vivero Municipal, donde se localizan las citadas parcelas en el polígono industrial Aquisgrana, al norte del casco urbano. La tramitación administrativa de la ordenanza que regula estos huertos retrasó ligeramente el plazo de la primera adjudicación, aunque la previsión es que, en el futuro, las solicitudes se presenten en el verano y las adjudicaciones sean en septiembre. El proyecto permite que superficies periurbanas en desuso sirvan para el autoconsumo de familias y retomar la cultura d el ahuerta, que en otro tiempo gozó de mucho arraigo en el término municipal. De esta manera, se da luz verde a la ordenaza reguladora para la gestión de los huertos sociales ecológicos —ubicados junto al área de servicio de la autovía Madrid-Cádiz—. Se fijan derechos y obligaciones.