La Audiencia autoriza que el exalcalde de Huesa siga libre

El exalcalde de Huesa Francisco Javier Gómez Sevilla, sus allegados y quienes apoyan su causa respiran aliviados después de que la Audiencia de Jaén acuerde mantener la suspensión de su pena a tres años y dos meses de cárcel impuesta por el Supremo por un delito de falsedad documental del que fue absuelto en primera instancia. La última palabra la tendrá el Consejo de Ministros, que deberá resolver acerca del indulto.

La resolución del tribunal no atiende la petición de la acusación particular que, en septiembre de este año, solicitó que levantara la suspensión y ejecutara el ingreso en la cárcel. Tanto la defensa del exdirigente socialista como el Ministerio Fiscal rechazaron la solicitud del levantamiento de la suspensión. El argumento de la Audiencia es que el Ministerio de Justicia tiene suspendida la tramitación del indulto hasta que el Supremo le remita informes.

La condena se dictó en el verano de 2016 y dio lugar a movilizaciones vecinales en Huesa, apoyadas por Gómez Sevilla y sus allegados, así como el actual alcalde, Ángel Padilla, del PSOE. Hace un año la sección tercera de la Audiencia de Jaén, como explica Europa Press, decidió dejar en suspenso el ingreso a la espera del dictamen del Gobierno. Fue justo tres días antes de que se cumpliera el plazo para el encarcelamiento y fue una medida a la que no se opuso la Fiscalía. El dictamen destacaba que Gómez carecía de antecedentes y llevaba dos años retirado de la política. Otro de los factores que se valoró fue que el exedil no se había llevado ni un euro de dinero público sino que lo que hizo fue destinar fondos de subvenciones a jornales en obras municipales distintas a las que inicialmente se asignó el dinero de erario público.

El caso deparó una condena por parte de la Audiencia jiennense, en diciembre de 2015. Se consideraba al exalcalde inductor y al arquite cto municipal como autor, por lo que se imponía una suspensión para empleo o cargo público por certificación falsa. Gómez Sevilla entonces salió absuelto de los cargos de falsedad. El Ministerio Público recurrió el fallo y finalmente se produjo el castigo del Tribunal Supremo, que elevaba sustancial la pena, que incluía la prisión, e imponía al expolítico de Huesa el pago de una multa de 3.600 euros.

Ante el mantenimiento de la suspensión, Francisco Javier Gómez valora la decisión de la Justicia. “No me extraña porque la resolución y los informes reconocen que no había hecho nada para merecer la pena impuesta por el Supremo”, recalca. El vecino de Huesa dice que espera que el Consejo de Ministros resuelva cuanto antes. Por otro lado, Gómez agradece el apoyo “meridianamente claro”, del actual alcalde, el equipo de Gobierno, concejales, y anteriores responsables del Ayuntamiento, así como el claro respaldo social plasmado en las movilizaciones de hace un año.

Ángel Padilla, también en declaraciones a Diario JAÉN, afirma, en relación con el asunto: “Estoy satisfecho, como no puede ser de otra manera, porque, en su día, la los tres presidencia de sala de la Audiencia coincidieron en que no había delito como tal para el ingreso en prisión, sino una cuestión de tipo administrativo, como mucho, que supone inhabilitación. No hubo beneficio a terceros ni propio ni menoscabo a los intereses públicos”.