Jaén, a la cola en reservas de agua toda la cuenca

Este 2018 arranca como el peor para los embalses desde 1995

04 ene 2018 / 08:34 H.

El nuevo año, como recién nacido que es, es inocente, pero arranca con mal pie por la sequía heredada del que se fue. El agua embalsada en estos momentos en la provincia de Jaén es de 599,45 hectómetros cúbicos, un 25,78 por ciento de la capacidad de los pantanos, lo que la sitúa a la cola de toda la cuenca del Guadalquivir. De hecho, según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, 2018 arranca como el peor año para los embalses, en el ámbito nacional, desde 1995, con un 38,93 por ciento de agua almacenada.

Pese al aumento experimentado en los niveles de los embalses gracias a las últimas lluvias, la reserva hidráulica cuenta en la actualidad, en líneas generales, con un 23 por ciento menos de agua que hace solo un año y un 32 por ciento menos que la media de la década.

Pese a todo, las precipitaciones fueron abundantes en toda la Península durante la pasada semana y la máxima se produjo en Vigo, con 103,6 litros caídos por metro cuadrado. En los datos aportados por el Ministerio sobre cómo está el panorama en el ámbito nacional, que pinta feo no obstante, cabe destacar que las cuencas de Tajo y Duero presentan su menor volumen de agua embalsada a comienzos de año desde 1990, y que las del Segura y Júcar, aunque registraron peores situaciones en el pasado y crecieron levemente en la última semana, se encuentran al 14,4 y al 25,3 por ciento, respectivamente, que tampoco es para echar las campanas al vuelo. Las situaciones de la vertiente atlántica y la mediterránea varían levemente. En la atlántica, los embalses se encuentran de media al 38,7 por ciento de su capacidad (13,3 puntos menos que hace un año), un volumen que solo fue inferior en 1992 y 1993. En la mediterránea, la reserva está al 39,64 por ciento (8,3 puntos menos que hace un año), una situación que solo fue peor en el año 2007. De las 16 cuencas españolas, diez se encuentran a comienzos de año por debajo del 50 por ciento de su capacidad, entre ellas la del Guadalquivir, que está al 32,1% de media en las provincias que la conforman, que son Jaén, Granada, Córdoba, Sevilla, Huelva y Ciudad Real; mientras que hace un año.

De mayor a menor volumen, la cuenca del Segura está al 14,37%; seguida del Júcar, al 25,3%; la Cuenca Mediterránea Andaluza al 30,7%; Guadalquivir, al 32,1%; Duero, al 32,5%; Tajo, al 37,6%; Guadalete-Barbate, al 39,1%; Guadiana, al 44%; las cuencas internas de Cataluña, al 45,1%; Miño-Sil, al 47,8%; Ebro, al 50,6%; Galicia Costa, al 52%; Cantábrico Occidental, al 64,5%; Tinto, Odiel y Piedras, al 69,9%; las cuencas internas del País Vasco, al 90,5%, y Cantábrico Oriental, al 91,8%. El valor medio nacional de precipitaciones no llegó ni a la mitad de lo normal, ya que se recogieron 125 litros por metro cuadrado de media, que supone un 44 por ciento menos de lluvias de lo normal, que son 224 litros por metro cuadrado, según datos facilitados la Agencia Estatal de Meteorología.

El Tranco se halla al 30,87% de su capacidad

La mejor referencia de cómo está la situación, el contrapunto, puede verse en el pantano de El Tranco, el más grande de la provincia de Jaén y uno de los de más capacidad de Andalucía. En estos momentos se encuentra al 30,87 por ciento, con 153,77 hectómetros cúbicos embalsados. Otros pantanos, como el Giribaile, con una capacidad de 475 hectómetros cúbicos, se encuentra aún peor, al 22,57 por ciento de agua embalsada. Le sigue en importancia por su volumen, el Jándula, de 322 hectómetros cúbicos, que está al 21, 77 por ciento. El Guadalmena, con 244,5 hectómetros cúbicos de capacidad, se halla al 26,86 por ciento, y La Fernandina, de 244,5 hectómetros cúbicos, al 31,6 por ciento. La situación no es halagüeña en el resto de embalses de la provincia, pero al ser estos más pequeños, la incidencia de la sequía se nota menos.