Jornadas de convivencia y de fervor

Los vecinos de Valdepeñas viven con mucha intensidad sus fiestas. Los actos comenzaron la noche del lunes con la inauguración del alumbrado especial y las actuaciones de grupos locales, prolegómenos de la coronación de las reinas y mister.

03 sep 2015 / 09:24 H.

Este año eligieron Reina Juvenil a María Martínez Marchal e Infantil, a Mercedes María Jiménez Castro. El Mister juvenil fue Paco Martínez Peña y el infantil, Antonio Torres Merino. Las dos damas de honor son Desire Escabias y María José Rodríguez. Todos fueron muy aplaudidos por el numeroso público de todas las edades congregado en la caseta municipal. Fueron coronadas por la teniente de alcalde, Laura Nieto Jaenes, y la concejal de Festejos, Dolores Ortega Amate.
El día grande de las fiestas de Valdepeñas, el martes, culminó al filo de la media noche, con un espectáculo piromusical de fuego y color, de gran belleza plástica, fusionando el fuego, la luz y la música. Lo hizo después de vivir unas intensas horas de procesión del Cristo de los Chircales. Antes, a las doce de la mañana, la cofradía matriz hizo el recibimiento a la filial jiennense, acto en el que participó un nutrido grupo de cofrades que se trasladaron desde la capital para asistir a los actos.
La segunda jornada de las fiestas comenzó a las doce de la mañana con la celebración de una fiesta religiosa, ofrecida por la Cofradía Matriz de Valdepeñas y oficiada por Antonio José Morillo, párroco de Castillo de Locubín. Estuvo concelebrada por el sacerdote local Ildefonso Rueda Jándula. Al oficio asistieron las autoridades locales, las cofradías de Valdepeñas y Jaén, además de numerosos vecinos. Durante el día también tuvieron lugar los juegos de “pareja a la fuga”, y la “carrera de lentos”. Actividades que consiguieron que los niños llenaran de risas las calles del municipio.
Por la noche, las principales calles valdepeñeras recibieron, de nuevo, la visita de su santísimo Cristo de Chircales en una solemne procesión, por segunda vez. Hizo un recorrido corto pero que se prolongó más de dos horas. La hermandad matriz y la filial jiennense, además de autoridades civiles y eclesiásticas acompañaron a la imagen, que también fue con la banda de música. Cientos de fieles alumbraron con sus velas el recorrido de la imagen, lo que despertó la admiración de los vecinos de municipios limítrofes que se acercan para presenciar el desfile procesional del Cristo.
Una vez terminada la procesión, el recinto ferial continuó con su bullicio de los más pequeños y en la caseta municipal, dos orquestas amenizaron la jornada festiva.
De esta manera, un año más, los vecinos de Valdepeñas de Jaén cumplen con una tradición de cientos de años que se va trasmitiendo de generación en generación. Es una cita arraigada a un pueblo noble que cada doce meses espera con ilusión este momento en el primer día de feria grande que se celebra en honor al Santísimo Cristo de Chircales, siempre del 1 al 5 de septiembre.