Olivareros preocupados por el acceso a sus fincas

Si hay una muestra de que una infraestructura concluida puede ser un revulsivo para un municipio, esa es la variante de Arjonilla. Los vecinos aguardan, como agua de mayo, a que las obras estén acabadas, para erradicar, de una vez por todas, el tráfico de camiones pesados hacia la orujera través del núcleo urbano que tantos dolores de cabeza les causan.

10 oct 2014 / 09:00 H.

Por eso, no es de extrañar que el alcalde, Miguel Ángel Carmona,  esté pendiente de cada paso que se da y de la evolución de los trabajos, que marchan a buen ritmo. Porque la campaña está a la vuelta de la esquina y todas las miradas están puestas en esta carretera.

Un aspecto que importante es articular la fórmula para que los olivareros puedan acceder a sus fincas, afectadas por los tramos en obras. En este caso, el delegado reconoció que todavía se estudia la solución, que podría ser, en algunos casos, con entradas alternativas. Sin embargo, no está determinado. Lo que sí queda claro es que, por fin, la variante avanza y el tan ansiado final está más cerca.

A principios de septiembre, la Junta anunció un corte de tráfico en la carretera A-6176, que une Arjonilla con la A-305. Se habilitó, en ese momento, un desvío alternativo de unos 14 kilómetros de longitud y 15 minutos de tiempo de recorrido. El desvío era obligado para ejecutar la glorieta de intersección de la nueva variante con la propia A-6176. La restricción de circulación tenía una duración prevista de dos semanas, lo que ha sido dicho y hecho. “Tardaron dos días más en abrirla, pero  cumplieron”, explica el alcalde. Miguel Ángel Carmona relata que  se puso en contacto con la Delegación de Fomento para conocer los tiempos de ejecución.

Pero para el municipio hay otro  aspecto fundamental que se deben tener en cuenta. En primer lugar es que en el momento en comience la recolección, el tráfico de vehículos por Arjonilla volverá a ser una pesadilla. Por eso, Miguel Ángel Carmona pide que se priorice el asfaltado del tramo entre el municipio y Marmolejo. De esta manera, se podrían derivar el tráfico pesado, de la orujera, para que no pase justo por el medio y cause los problemas de años atrás.

El delegado de Fomento, Juan Antonio Sáez, aseguró que este no será un problema y se podrá llegar a un acuerdo. Es más, avanza que las obras marchan a buen ritmo y que se podrá abrir la variante a final de año —con una previsión de 15 días de lluvia—.