Más de 200 personas buscan sin descanso a Ángel Arroyo

Camiseta blanca de pico y pantalones piratas con una terminación en forma de puño, color amarillo fluorescente. Así iba vestido Ángel Arroyo García la última vez que sus padres lo vieron, y eso fue el miércoles por la noche. Desde entonces, nada se sabe de este vecino de Orcera, de 21 años, que sufrió un accidente sobre la una y media de la madrugada y desapareció.

26 sep 2014 / 09:26 H.

Aunque la denuncia ante la Guardia Civil no se presentó hasta pasadas las 24 horas correspondientes, el miércoles por la tarde, tanto la familia como patrullas de la Benemérita del municipio comenzaron con las pesquisas, con la estrecha colaboración del Ayuntamiento y su alcalde, Sergio Rodríguez. El joven orcereño tuvo un accidente con una furgoneta Renault Kangoo de color rojo, propiedad de los padres. “Nosotros no se la dejábamos. Se sacó el carné hace poco y era algo inexperto. Alguna vez la condujo y le hizo un roce, pero nada importante. Cada noche guardo las llaves en la mesita para que no las cogiera, pero ese día no lo hice”, lamenta Sonia, la madre de Ángel Arroyo García. Desde entonces no descansa, al igual que el resto de la familia, que busca en cada noticia un aliento de esperanza. Al principio, pensaban que su hijo no aparecía por temor a las represalias y, aunque cada vez contemplan más posibilidades, no lo descartan. “Solo queremos que vuelvas y darte un abrazo. El coche no importa, no te preocupes”. Es el grito desesperado al cielo de una madre.


El alcalde explica que cerca de donde apareció el vehículo —que se estrelló contra un árbol en la carretera que conecta el municipio con Cortijos Nuevos— se encontró el móvil del joven. Según pudo saber este periódico, también se localizó un pequeño bate dentro de la furgoneta siniestrada. Precisamente en toda esa zona se centró la primera jornada de búsqueda. Una vez interpuesta la denuncia, la Guardia Civil activó el dispositivo correspondiente para buscarlo. Se sumaron Protección Civil de Beas, el Seprona y personal del Ayuntamiento. Ya por la tarde, a las 15:30 horas, se organizó la batida de vecinos voluntarios. El alcalde de Orcera explica que más de 200 personas participaron en las labores de rastreo, que se ampliaron a unos siete kilómetros de radio sobre el lugar de los hechos. A última hora de la tarde, se les sumó la unidad canina de la Guardia Civil, Cuerpo armado que, según explicó a este periódico, pone todos los medios para encontrar al joven desaparecido. De hecho, al cierre de esta edición todavía no lo habían localizado, por lo que las labores de los agentes se prolongarían durante la noche. Se barajan todas la hipótesis y, además, se ha abierto una investigación paralela para intentar arrojar algo de luz a un hecho que pocos orcereños son capaces de creer. No estuvieron solos, ni mucho menos. Tanto la familia de Ángel Arroyo como el alcalde del municipio agradecen la implicación de vecinos de los municipios de los alrededores. Es el caso, por ejemplo, del Ayuntamiento de Siles, que puso a disposición de la labores de rastreo.


Mientras tanto, los padres no salen del cuartel de la Guardia Civil, donde permanecen “atrincherados” hasta que suene el teléfono y les digan que han encontrado a Ángel. Al cierre de esta edición, esa llamada no había llegado.