La tierra deja de temblar al fin en La Loma

Los sobresaltos a media noche, el movimiento brusco de los muebles y el miedo metido en el cuerpo cada vez que temblaba la tierra son sensaciones que los vecinos de La Loma esperan no repetir más. Los expertos dan por concluida la serie sísmica que, durante un año y medio, mantuvo en vilo a Torreperogil y a Sabiote principalmente. Más de 2.300 terremotos después, la tierra deja de temblar por fin. El responsable del grupo de investigación sobre riesgo sísmico y rectónica activa de la Universidad de Jaén, José Antonio Peláez, confirma que la posibilidad de que se reproduzcan los episodios del último año y medio es difícil, aunque siempre queda la posibilidad de que se registren “pequeños terremotos durante un tiempo” sin la intensidad de los que mantuvieron en vilo a los vecinos de la comarca de La Loma.

04 abr 2014 / 09:00 H.

El profesor del Departamento de Física de la UJA y una de las voces más acreditadas para hablar del denominado enjambre sísmico de Torreperogil y Sabiote afirma que la intensidad de los terremotos ha ido descendiendo de manera paulatina hasta prácticamente desaparecer. No obstante, insiste en que todavía la zona está bajo la influencia de la “sismicidad residual”. Esto se traduce terremotos prácticamente inapreciables para la población, como el que se registró el pasado 29 de marzo en Torreperogil de 1,4 de grados en la escala Richter, muy lejos del que, el 15 de diciembre de 2012, sacudió la comarca con una magnitud de 3,8.
El alcaldesa de Torreperogil, Jose Cabellero, reconoce que los vecinos están más tranquilos, después de que “haya pasado lo peor”.  “No se han notado más temblores de importancia y ojalá sigamos así durante mucho tiempo, porque para nosotros ha sido como una pesadilla”, apunta la regidora que confía en que el análisis de los expertos se confirme y, de una vez por todas, la serie sísmica pasa a la historia y a los libros de Física y Geología.
En la vecina población de Sabiote, el ambiente también es más relajado, aunque con la tensión propia del miedo vivido en el último año y medio como consecuencia de los terremotos.
causa. Dos fallas de no gran tamaño fueron las causantes de las series sísmicas de La Loma, según el estudio oficial coordinado por el Instituto Geográfico Nacional (IGN), en el que se descarta que estuvieran inducidas por la mano del hombre, como podría ser derivada por la técnica del fracking. Los trabajos de los distintos grupos que participaron en el estudio y que son “punteros” en España, desde el CSIC al Instituto Geológico Minero de España, el Colegio Oficial de Geólogos, la Comisión Española de Geodesia y Geofísica y las universidades de Jaén, Granada y Navarra., concluyeron que su origen es “tectónico” y, además, no estaba relacionado con la influencia del agua, por ejemplo subterránea o por su comportamiento en embalses, como sería el cercano del Giribaile.