Conflicto por la “okupación” de la casa cuartel de Coto Ríos
Una familia lamenta que invirtió 10.000 euros en rehabilitarla y ahora no puede vivir
Eva Sánchez Cruz está indignada. Esta madre de dos hijos, en paro y sin vivienda, exige al Ayuntamiento de Santiago- Pontones que le dé explicaciones del porqué su familia no puede vivir en su vivienda “okupada” de la Casa Cuartel de Coto Ríos, mientras que sí lo hacen dos familias. Para entender la situación hay que remontarse hasta finales de 2012. En ese tiempo hasta siete familias llegaron a invadir el inmueble de propiedad municipal, que llevaba abandonado desde hacía quince años. En ese momento, el alcalde del municipio ofreció una solución dentro de la legalidad. En aquel entonces, Pascual González consideró que la estructura era sólida y que la antigua casa cuartel podía rehabilitarse y destinarse a familias con escasos recursos demandantes de una vivienda.
Eva Sánchez fue una de las familias que, en su día “okuparon” la vivienda. Según explica, invirtió cerca de diez mil euros en rehabilitarla y acondicionarla, pero asegura que lleva cuatro años intentando poder utilizarla. Sin embargo, el Ayuntamiento no se lo permite. “No entiendo cómo a unas familias les dejó quedarse y les dio el agua y la luz y otras ni siquiera nos coge el teléfono. Exijo que me dé una explicación y me diga por qué unos sí tienen derecho a la vivienda y otros no”, criticó Eva Sánchez, quien indicó que, al igual que ella, también está otra familia. En aquel momento, el regidor indicó que solo se permitió permanecer en las viviendas a dos familias por su situación y porque eran las únicas que estaban registradas como demandantes de vivienda.
Este periódico se puso en contacto con el alcalde de Santiago-Pontones, Pascual González, quien añadió que el Ayuntamiento lleva cuatro años intentando regularizar la “okupación de las viviendas”. “Una vez que las familias entraron, este alcalde les tendió una mano para que pudieran quedarse. ¿Qué ocurre? Que a lo largo de este procedimiento nos hemos encontrado con que el suelo en el que se encuentra el Cuartel es suelo dotacional y, por tanto, se tiene que cambiar a residencial. Y en ello nos encontramos. De ello tuvimos constancia en 2015, por lo que las viviendas que ya estaban habitadas continúan y las que quieren habitar no les podemos dar los permisos, porque sería ilegal”, indicó.
Eva Sánchez asegura que lo único que pide es que el alcalde se reúna con ella y pueda conocer en qué situación se encuentran las viviendas. “Yo entiendo que legalizarlas conlleva un proceso, pero no acabo de comprender por qué durante estos cuatro años no se ha dignado ni a cogerme el teléfono”, manifiesta la jiennense, quien añade que, durante todo este tiempo, lleva viviendo en casa de su madre con sus dos hijos, por lo que necesita la vivienda. “En su día nos dijeron que sí. Invertimos nuestros ahorros en poder acondicionarla, porque el edificio es viejo, y ahora nos vemos sin dinero y sin casa, mientras otras familias sí que pueden habitarla, no entiendo lo que está pasando y por eso, quiero que el alcalde dé la cara y nos lo explique de una vez. Si tiene que regularizar la situación, que lo haga con todas las familias, no que a unas no se nos deje vivir y a otras sí”, critica. Al igual que ella también se encuentra Fabiola Ruiz. En su caso no acometió ninguna reforma en la Casa Cuartel, pero es “adjudicataria” de una de ellas.
Frente a esta situación, Pascual González se mostró tajante con el conflicto. “Yo estoy intentando resolver un problema que no es mío y que no debería. Estamos intentando que estas viviendas puedan ser habitadas por estas familias necesitadas y todo lleva su proceso, si hay algunas que están viviendo es porque desde un primer momento se quedaron y cuando nos enteramos del problema que teníamos con el suelo ya estaban dentro”, comenta el regidor. Incluso, agrega el alcalde que es tal la preocupación del Ayuntamiento con estas familias que realizó un proyecto de mejora en la Casa Cuartel con fondos del antiguo PER. “Hemos ido siempre con la buena voluntad de ayudar y prestar todo nuestro apoyo con estas familias, por lo que no entendemos el conflicto”, concluye el alcalde de Santiago-Pontones.