Un “documento fantasma”

El grupo municipal de IU calificó de “extraña situación” toda la polémica desatada en torno al informe sobre la inundabilidad del río Guadalquivir. El portavoz de la coalición de izquierdas, Juan Francisco Cazalilla, acompañado por el geólogo y profesor José Manuel Marín, acusó al PSOE y al PP de “lanzarse la pelota” el uno contra el otro con un “baile de fechas”. También tachó de “irresponsable” a la Plataforma de Afectados por las Inundaciones por no querer poner el informe técnico a disposición de los partidos políticos, así como de los técnicos del Ayuntamiento. Además, insistió en la incidencia que tiene la presa de Marmolejo en las inundaciones.

Con respecto a las obras de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir para ampliar las motas del río y la inversión de seis millones de euros para su adecuación, Juan Francisco Cazalilla señaló que “no son determinantes” ni “neutralizan” el problema. En este sentido, denunció: “La Administración Pública viene de forma periódica, deja una cantidad de inversión para callar bocas e intentar tranquilizar a los vecinos. Pero no termina de solucionar la problemática existente”. De hecho, calificó esta actitud de “un pozo sin fondo de recursos públicos”. “Mientras no se quiera abordar la solución definitiva que desde IU se defiende, serán millones de euros los que se irán derrochando o tirando al río”, apostó.

Por otro lado, Juan Francisco Cazalilla advirtió de que las inundaciones “tienen hipotecado” el desarrollo industrial y económico de la ciudad”. Además, recriminó que tanto el PSOE como el PP no cesan de hacerse reproches. Por último, tachó de “nefasta” la actitud de la plataforma de afectados en defensa del río. “No es nadie para negar ese informe tan importante sobre las inundaciones en la ciudad, que afecta al desarrollo económico, seguridad de las personas, algo para lo que no está capacitado al no estar a la altura de las circunstancias”, alertó Cazalilla.

Por su parte, José Manuel Marín indicó que el informe técnico “es un documento fantasma”, ya que existe, pero que nadie lo ha visto. Recordó que cuando comenzó el problema, la coalición estuvo junto a la plataforma en todas las manifestaciones y que acudieron a la Confederación a por el “supuesto documento que acabaría con las inundaciones”.

Respecto a los informes, Marín aseveró que hace dos meses realizó un análisis en el que concluía que antes de existir la presa de Marmolejo, el Guadalquivir tenía una pendiente de 0,07% de inclinación. “Mientras no recupere esa misma inclinación, va a seguir acumulando barro”, denunció. En este sentido, aseguró que la corriente de agua intenta reconstruir su perfil de equilibrio. “Eso no se resuelve aumentando las motas, ni quitando barro del río, sino eliminando la Presa de Marmolejo”. Por último, alertó de que se debe poner en tela de juicio todos “los informes”, ya que el documento realizado en el año 1996 falló.