La Virgen de la Cabeza reina en la ciudad tras su novena

La imagen vicaria que venera la Cofradía Matriz procesionó entre su pueblo

12 may 2019 / 15:48 H.

Vítores, palmas y emociones desbordadas fueron la tónica de la magna procesión de “La Morenita", por las calles céntricas de la ciudad. Como manda la tradición, cada segundo sábado de mayo, tras la romería en el Cerro de la Cabeza y con los sentimientos de la peregrinación reciente en el Santuario de la flor de piel, la imagen de la Virgen de la Cabeza en la ciudad. Procesión entre el bullicio de los andujareños. Nueve días después del traslado desde su Ermita en la calle Ollerías, la tarde de ayer culminó con la función solemne.

A las 6 de la tarde, comenzó la sagrada Eucaristía presidida por el Arcipreste local, Pedro Montesinos y amenizada por el coro de la Hermandad Matriz, tras el rezo de la salve y el canto del himno de “La Morenita”, la cruz de la guía junto a las banderas de la Cofradía Matriz, anunciaba en la plaza de España, que la patrona de la ciudad iba a salir a sus calles. Cofradías Filiales de la Matriz, junto a Hermandades de Pasión y Gloria del municipio, nutrieron el amplio cortejo, hasta llegar a las banderas que abrían el tramo propio de la corporación mariana.

Momentos únicos se vivieron a la llegada de las procesiones de las Madres Trinitarias, cuando las religiosas, desde sus balcones enrejados, lazaron una gran petalá sobre la imagen. Una vez abandonado el centro de la ciudad, el cortejo procesional, bajó hasta la calle Calancha para llegar al popular “Cuadro de la Virgen", lugar donde comienza el camino hasta el Santuario y donde los peregrinos rezan para su bienestar en este. Como novedad en el itinerario, la comitiva abandonó la calle Ancha para dirigirse a la escuela donde se encuentra la Casa de la Hermandad de la Cofradía Matriz, una vez allí, las andas se procesan para realizar un encuentro emotivo entre la imagen y la sede.

Después de una larga procesión, la imagen de la Virgen detenida sobre los hombros de sus anderos y portadores, fue la prueba de la entrega del cetro de hermano mayor el nuevo responsable de la carga, Antonio Barrios, emocionado delante de La Morenita, lanzó cientos de vítores en señal de agradecimiento. Las banderas abrazaron la talla de la imagen, mientras delicadamente su anderos, la introducían en el templo, al compás de los últimos acordes de la Asociación Musical Maestro Amador, banda de música que acompañó a la Santísima. En el interior de la pequeña Ermita, se agolpaban vecinos y devotos que aún deseaban rezarle y vitoréala una vez más antes, de que fuera entronizada de nuevo en su camarín. Con el rezo de la salve y con el canto del himno a “La Morenita”, culminó la magna procesión, alrededor de la media noche, con estallido de cohetes. Con el fin de la festividad mariana en la ciudad en honor a la Virgen de la Cabeza, la Cofradía Matriz, ya ultima los preparativos para celebrar la “Romería Chica", en el próximo fin de semana.