Un reencuentro tras veinticinco años

Antiguas alumnas de Cristo Rey de la promoción del 78 se reúnen en el centro para recordar los tiempos pasados

24 dic 2017 / 11:14 H.

Veinticinco años no son nada”. Antiguas alumnas del colegio Cristo Rey, pertenecientes a la promoción de 1978, se reunieron un cuarto de siglo después de que terminaran sus estudios en el centro en el que pasaron su niñez. De las cuarenta integrantes del grupo alrededor de la mitad regresó para la ocasión. Una parte de las mujeres procedía de Alcalá la Real, mientras que otras llegaron desde diferentes puntos de España e incluso del extranjero, como las que residen actualmente en territorio de Israel y Francia.

Una de las asistentes, Loli Ramírez, explica que algunas de las personas llevaban sin verse dos décadas y media, mientras que otras, principalmente las que tienen su domicilio aún en el municipio, sí tienen contacto más frecuente. Señala que, por diferentes circunstancias, resultó imposible contar con todas las integrantes del colectivo. Pese a ello, se eligieron las fechas navideñas porque se trata de una época en la que muchas de ellas retornan hasta Alcalá para pasar unos días con sus familiares y amistades.

Las actividades comenzaron con la recepción en las instalaciones del centro educativo, situado en la calle Arcipreste Robles —de las Parras—. En la capilla, el actual párroco de Charilla y encargado de atender el monasterio de la Encarnación, Antonio Pérez —encargado de pregonar hace unos días las fiestas— , ofició una eucaristía en la que el sacerdote dejó su impronta de cercanía. Las monjas de Cristo Rey, como gesto de bienvenida, entregaron a las exalumnas unas felicitaciones para las fiestas, con fotografías pertenecientes al año 1992, cuando terminaron su periodo de formación. Las presentes se colocaron de manera idéntica a la posición de un cuarto de siglo atrás, para que quedaran patentes los cambios experimentados por todas ellas en este tiempo.

Se trató de una jornada intensa y repleta de referencias a vivencias comunes. En este sentido, Loli Ramírez destaca que juntas pasaron todo el periodo de párvulos y la antigua Educación General Básica (EGB). Explica que, cuando se marcharon, la tutora era Mari Tina Berbel. Al reencuentro asistieron algunas docentes de entonces, como Josefa Sánchez Abdelkader y Mercedes Almazán.

Después de salir del colegio, el grupo se dirigió hacia Casa Pepe, un establecimiento situado a solo unos metros, en la zona del Juego de Pelota. Allí disfrutaron de una comida “de picoteo”. “Elegimos este formato para estar de pie y relacionarnos más, de manera que cada una no hablara solo con las que estuvieran sentadas a su lado”, manifiesta Ramírez.

La vida indivual de las antiguas alumnas ha ido por trayectorias diferentes, tanto en lo personal como en lo profesional. No obstante, Loli Ramírez reflexiona al respecto: “Al final, cuando charlábamos, nos dimos cuenta de que éramos las mismas”. La intención del grupo es repetir el reencuentro, aunque todavía está pendiente de definir la fecha. Todo dependerá de la disponibilidad que tenga cada una. La ventaja es que prácticamente ninguna las integrantes de la promoción carezca de contacto con las demás a través de las redes sociales, y más después de la jornada de ayer, que sirvió para que estrechara lazos y repasaran una etapa al completo de sus vidas.