Un área urbana “desatendida”
Vecinos se quejan de los problemas del barrio de la carretera de Priego
Residentes en el barrio de la carretera de Priego reivindican al Ayuntamiento que se implique más con la zona situada por debajo de la avenida. Consideran que se trata de un área “desatendida”. Uno de los vecinos, Manuel Expósito, detalla los motivos de queja. En este sentido, reclama una señalización de las calles, una medida esperada desde hace años, para regular mejor el tráfico y aumentar la seguridad vial. Llama la atención sobre la falta de regulación en una intersección donde se juntan cuatro viales, las calles Camino Nuevo y Camino del Guadalcotón, el ramal que se dirige a la carretera de Jaén y a la Avenida de Portugal. Además, reivindica algún tipo de resalto que disminuya la velocidad excesiva con la que circulan algunos automóviles.
Por otro lado, el descontento se dirige hacia el estado del polideportivo abierto hace dos años. Según Expósito, la falta de vigilancia y la circunstancia de que la puerta esté siempre abierta propicia vandalismo, con daños en el mobiliario urbano, por ejemplo una papelera y una caseta utilizada para almacenamiento. El vecindario lamenta que las instalaciones ni siquiera tengan aún servicios o vestuarios, de modo que algunas personas orinan a la entrada. Igualmente, habitantes del entorno piden explicaciones por la tardanza en remodelar las pistas actuales, ya que la idea municipal era reconvertir al menos una de ellas en una zona verde.
Otro motivo de malestar cívico es la suciedad que se extiende por dos grandes solares sin vallar del Ayuntamiento, el parque y buena parte del barrio. “Hay botellón y se consumen estupefacientes”, afirma Manuel Expósito, quien demanda más presencia policial. Asimismo, existen protestas por la presencia de baldosas en mal estado en las aceras. “Si no nos escuchan recogeremos firmas y haremos una manifestación. Pagamos impuestos como todo el mundo”, concluye Expósito.
respuesta. Fuentes del Ayuntamiento consultadas por Diario JAÉN afirman que no tienen constancia de las quejas, pues no constan en el Registro General ni en el servicio Línea Verde. En cuanto a la conversión de las antiguas pistas, apuntan que se ejecutará “cuando tenga encaje presupuestario”. Sobre el polideportivo actual, subrayan que están en funcionamiento con actividades de dinamización y que el proyecto se priorizó a propuesta vecinal.
El colectivo de discapacitados físicos y sensoriales Álamos acaba de reabrir el centro de acceso público a internet (CAPI) de la calle Grecia, en el barrio de la carretera de Priego. El presidente de la asociación, Manuel Arjona, explica que, en principio, la duración de la nueva etapa es de cinco meses. El servicio da trabajo a una dinamizadora. El funcionamiento de las instalaciones es de lunes a viernes entre las nueve de la mañana y las dos de la tarde. Arjona indica que, por el momento, ha llegado la aprobación de la subvención concedida por la Junta de Andalucía, aunque no el dinero, por lo que la puesta en marcha se efectúa con fondos de “Álamos”. “Hacemos un esfuerzo al asumir los gastos para que preste servicio el CAPI”, destaca el presidente.
Las dependencias están muy concurridas por personas de todas las edades, entre ellas, menores que aprovechan para pasar allí su tiempo de vacaciones. En el CAPI, además de acceso a internet, se ofrecen algunas acciones formativas. También se enseña a manejar el móvil con aplicaciones como WhatsApp, a preparar y enviar el currículo y a gestionar citas con los servicios de empleo y Tráfico. El centro llevaba cerrado desde enero. Se inauguró en 2010, pero, desde 2014, funciona de forma intermitente.